Ante la decisión de la empresa multinacional de dejar a 600 familias en la calle, los trabajadores denunciaron el cierre fraudulento, los despidos ilegales, y en asamblea decidieron ingresar a la fabrica para defender sus puestos de trabajo y resguardar las maquinas. Los trabajadores de PepsiCo tienen que ganar para que no pasen más despidos en la alimentación.
Martes 27 de junio de 2017 08:42
PepsiCo se jacta con su slogan “te hacen la vida más feliz” pero deja en la calle a 600 familias. El 20 de junio la multinacional norteamericana les avisó a sus trabajadores con un simple cartelito en la entrada a planta que decía “cese de operaciones”. El argumento fue “los obstáculos inherentes a la ubicación de la planta en un área mayormente residencial, su compleja estructura de costos y extensos requerimientos logísticos”, relocalizando la producción en su planta de Mar del Plata. PepsiCo no tiene ningún problema económico: en 2016 a nivel mundial facturaron U$S 10,3 mil millones, de las cuales el 8 % salieron de sus plantas de Argentina. Para ellos la vida de 600 familias vale menos que sus ganancias.
La realidad es que los empresarios y gobierno de Macri buscan atacar los convenios colectivos, bajar los salarios y flexibilizarnos. El cierre de PepsiCo Florida es parte de ese plan empresario, que hasta el momento dejó más de 200.000 despedidos y 7000 en las alimenticias, con un retroceso del salario real, mientras los empresarios embolsan millones.
En PepsiCo hace años que sus trabajadores se organizaron y se plantaron ante los ataques de la multinacional. Lograron muchas conquistas como categoría de medio oficial para las empacadoras, el pase a planta de los tercerizados, y condiciones que justamente hoy se proponen atacar para disciplinar al resto del gremio.
Pero la fuerza de lucha de las/os trabajadoras/es de PepsiCo es mucha. Rápidamente junto a la Comisión Interna y en asamblea votaron pelear hasta el final por su derecho al trabajo. La fuerza de los trabajadores presiono a que Rodolfo Daer convocara a un Plenario de Delegados y Activistas del STIA Filial Bs As para discutir la situación de PepsiCo.
Daer y la Verde traicionan la lucha
En el plenario con más de 100 compañeros de PepsiCo presentes, Daer rechazó la exigencia de paro general y propuso “dar un mensaje en las urnas en octubre”, donde apoyará a Randazzo. Esto generó una enorme bronca. También dijo que no se podía hacer más que pelear por una mayor indemnización. También se negó a aportar el “2% solidario” que el STIA le descuenta a todos los trabajadores bajo convenio para el fondo de lucha.
Una traición de la conducción del STIA, que es coherente con su actuación en las audiencias del Ministerio de Trabajo donde firmaron un acuerdo con la empresa por mejores arreglos abandonando la lucha. Acuerdo que la comisión interna se negó a firmar.
El STIA y la verde juegan para los empresarios, como hicieron en Kraft en 2009 avalando los despidos y como están haciendo en todo el gremio donde están pasando despidos y cierres. Lo vimos en Bimbo, Fargo, Cresta Roja, Alco, Nevares y decenas de fábrica donde hay despidos encubiertos y por goteo como en Mondelez Planta Pacheco. En la paritaria firmaron el 24% sin lucha. Daer llega al colmo y se sienta a cenar con Macri mientras 600 familias se encuentran despedidas.
Si gana PepsiCo ganamos todos
Llamamos a todos los trabajadores de la alimentación a rodearlos de solidaridad llevando el apoyo a la fábrica, impulsando un gran fondo de lucha para que no sean quebrados por el hambre y participando de todas las acciones que llamen los trabajadores. Mientras seguimos exigiendo un paro nacional y plan de lucha del STIA-FTIA y la CGT contra los cierres de empresa y despidos.
¡Los trabajadores de PepsiCo tienen que ganar para que no pasen más despidos en la alimentación! ¡Familias en la calle nunca más!
Agrupación de la Alimentación Leonardo Norniella
