Primer acto: "Un baño de realidad"
Domingo 7 de agosto de 2016 23:02
Carlos es un vecino como cualquier otro. Alquila un departamento que le cuesta la mitad de su sueldo en el barrio de Once... Trabaja diez horas diarias como empleado de comercio y sueña con volver a ver al Globo campeón algún día.
El lunes 6 de junio, el despertador lo sacó de la cama a las 6:35 para arrancar una nueva jornada laboral.
Hasta ahí, nada nuevo.
Mientras tomaba su tercer mate, no sin dificultad, se agachó a recoger la factura de gas que asomaba tímidamente por debajo de la puerta. De pronto, algo irrumpió el momento sublime de la cebada. Un aumento de más de un 500 por ciento fue la cachetada que terminó de despertarlo... Fue a partir de ese momento que su vida pegaría un giro radical. Macri lo invitaba desde la televisión a cambiar sus hábitos de consumo.
Cayó en la cuenta que la ducha caliente después del trabajo, a partir de ahora, era un lujo de una clase social a la cual él no pertenecía.
¡¡“Derroche de energía” rezaba enardecido el ministro Aranguren!!
Y Carlos rápidamente puso todo su ingenio en marcha para adaptarse a los tiempos que corren.
¿Cuánto tiempo podrá soportar una ducha de agua fría antes de salir a la calle a enfrentar el ajuste?
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