El movimiento en la encrucijada. Trabajador explica cómo desligitimaron el CCT de la CTM de Goodyear

Los trabajadores que impulsan el Sindicato Independiente de Goodyear vieron este resultado como un triunfo para echar a los charros de la CTM (central charra que votó un contrato a las espaldas de sus trabajadores). En comunicación con Izquierda Diario nos cuenta de su lucha.

Izquierda Diario: Cuéntanos cuánto tiempo y cómo se prepararon en Goodyear para la elección del 7 y 8 de mayo

Compañero de Goodyear: Llevo 5 años en la lucha por las mejoras de condiciones de trabajo para mí y mis compañeros. Pero hay compañeros que llevan más. El trabajo ha sido difícil. Hemos tenido que visitar a los compañeros en sus casa porque no nos permite la patronal organizarnos en la planta. Tuvimos que ir casa por casa y por eso nos mal pasábamos.

Explicando sobre como los trabajadores podemos hacer el cambio, hicimos reuniones y seguimos haciendo reuniones para discutir acerca de nuestros derechos. Nos han apoyado los trabajadores de Telmex, los de Continental. Lo del 7 y 8 fue un gran paso adelante más: era clave ganar el NO en las votaciones porque el contrato colectivo lo consideramos de protección patronal entre la empresa y la CTM.”

Izquierda Diario. ¿Qué sucedió el 7 y el 8 de mayo?

Compañero de Goodyear: Nosotros vimos que en ocasiones anteriores al 7 y el 8 la CTM se robó las urnas. Entonces comenzamos a organizarnos en los tres turnos para vigilar que no sucediera de nuevo. Ese contrato no nos representaba y ahora exigiremos rehacer un nuevo contrato ley para la industria hulera. Ese día ganamos las y los trabajadores. Han sido años de mucha tensión y preocupación por parte de los compañeros y los últimos días previos al 7 y 8 de mayo más, porque querían hacernos fraude de nuevo.

Izquierda Diario. Hace 5 años los trabajadores hicieron un paro laboral. Cuéntanos cuáles fueron las demandas.

Compañero de Goodyear: Hace 5 años comenzó el movimiento en la planta. Los trabajadores comenzamos a luchar para mejorar las condiciones de nuestras familias en particular revisar el Contrato Colectivo. Es importante señalar que los trabajadores que fueron despedidos estuvieron esta vez al pie del cañón en la campaña por el NO.

Los trabajadores de Goodyear en la encrucijada

Tras los resultados de la consulta en Goodyear, la CTM perdió la titularidad del Contrato Colectivo de Trabajo. El 84 % de los 1,149 trabajadores sindicalizados rechazaron con el NO a la CTM, pues negociaron a las espaldas de las y los trabajadores el Contrato Colectivo de Trabajo. El repudio fue tan grande que la CTM desesperada trató de robar las urnas. Ahora bien, las y los trabajadores de la planta se quedaron sin representación sindical ante la patronal.

Anteriormente, en 2018, las y los trabajadores de Goodyear se fueron a paro laboral fundamentalmente por denuncias de explotación laboral, bajos salarios y nulas prestaciones. Las y los trabajadores líderes de dicho movimiento fundaron el Sindicato Independiente De Trabajadores de Goodyear México (SITGM) y fueron los principales impulsores del NO en la consulta del 7 y 8 de mayo.

El problema central que pone a los trabajadores de Goodyear en la encrucijada es que actualmente no existe sindicato. Si bien el Sindicato Independiente tiene presencia en la planta debe reunir el 30 % de la plantilla laboral (unos 400 o 500 trabajadores) para disputar la titularidad del contrato y la representación de la base trabajadora, una cuestión crucial cuando la patronal y la Secretaría del Trabajo abren la puerta a otras centrales sindicales mafiosas, incluida la recién repudiada CTM, para disputar el CCT.

Hoy las y los trabajadores de Goodyear cargan con la responsabilidad de poner en pie un nuevo instrumento de organización obrera que funcione completa y totalmente distinto a los sindicatos charros y de protección patronal. Un sindicato cuyos estatutos garanticen la democracia obrera (el funcionamiento de asambleas), las elecciones democrática sde los cargos, el funcionamiento transparente de los recursos ante la base, con delegados revocables y electos en asamblea, que reivindique las luchas de las y los trabajadores y la independencia de clase frente a los partidos de los empresarios, así como los métodos de lucha de las y los trabajadores para conseguir sus demandas como el paro y la huelga. Firmemente organizados desde abajo para impedir el regreso de cualquier ala del charrismo sindical.

Esa es la perspectiva que está puesta en la mesa pues también existe la posibilidad y el peligro de que se desaproveche esta oportunidad histórica y que se desvirtúe la lucha y surja un sindicato que no cumpla con los objetivos originales de la lucha. La votación por la desligitimación de la CTM y su Contrato Colectivo fue un gran paso adelante que dio la base trabajadora descontenta y que los compañeros independientes deben de encaminar hacia la obtención de un contrato colectivo de trabajo que supere el existente en 2015.

Hay que dar una dura batalla para lograr la unidad de todos los compañeros, incluyendo a los que votaron a la burocracia cetemista, lo que será clave para reorganizar el movimiento de la industria hulera y hacer carne el planteamiento del SITGM que opina que, al dejar de existir el CCT de la CTM, las y los trabajadores de Goodyear ahora deben regirse por el contrato de la industria hulera, cuya última revisión conunta rigió del 2015 al 2017. Se abre el escenario para que las personas trabajadoras de Goodyear y de otras plantas se vean beneficiadas por la aplicación del Contrato Ley de la Industria del Hule, lo que precisa que la base trabajadora de Goodyear y las demás fábricas de la industria se pongan en pie de lucha de manera unificada.

Luchar por todas las reivindicaciones de los obreros de la industria hulera

Efectivamente el contrato de 2015 tiene mejores condiciones que el del sindicato Manuel Trujillo: el pase a planta de trabajo a los 30 días, la obligación de la empresa de pagar salarios al 100 cuando no exista carga laboral, la reparación de la maquinaria por parte de la empresa, el fin de los interinatos, etcétera.

Sin embargo, ese contrato también requiere ser discutido de forma democrática por las y los trabajadores para que puedan modificarlo para mejorar las conquistas laborales por encima del mismo contrato. Por ejemplo, los puntos del contrato relacionados con las obligaciones del trabajadores implican una serie de repercusiones en el terreno de la productividad que debe ser debatido por la base obrera para evitar la explotación laboral, los puntos relacionados a la jornada laboral de 40 horas por 5 días también podría ser modificadas y debatidas así como de las obligaciones de la empresa, descansos y obligaciones de la empresa.

Aunque el contrato de la industria hulera tiene mejores prestaciones que el firmado por la CTM se requiere de una discusión de las plantas dispuestas a imponer de nuevo el Contrato Ley y sus plantillas. Dicho contrato firmado el 9 de abril de 2015 debe ser discutido por las y los trabajadores y esa es una de las principales tareas que debe afrontar el Sindicato Independiente de Goodyear impulsando un plan de lucha que se extienda a los trabajadores de las demás fábricas de esta importante rama industrial. La unidad interfabril y asambleas democráticas harán posible la discusión de cómo reinstaurar ante los patrones y la Secretaría del Trabajo ese tipo de Contrato Colectivo de Trabajo, el poderoso Contrato Ley que sus antecesores mantuvieron vigente durante décadas.