En el marco del plan de lucha de las y los trabajadores de la salud de Mendoza, que incluyó un paro por 48 hs, enfermeras precarizadas denunciaron que su salario se encuentra al borde de la línea de indigencia y que cobran menos de la mitad de la Canasta Básica medida por el propio Gobierno provincial
Jueves 24 de junio de 2021 00:00
"Les compartimos los sueldos de un Licenciado en enfermería contratado: sueldo $ 28.000 pesos mensuales por 40 hs semanales. Con los descuentos, monotributo, etc, de bolsillo nos queda $ 24.000 pesos en mano. Un legislador, con el aumento de Julio, cobrará $ 240.000. Esta es la desigualdad salarial que denunciamos. Esta es la precarización a la cual nos somete Suárez". Con esa denuncia, trabajadores y trabajadoras de la salud comenzaron un paro por 48 hs que incluyó una movilización a Casa de Gobierno y una acción en las redes sociales.
"Nos amenazan con descuentos, por intentar hacernos escuchar. El gobierno se niega a llamarnos a conciliar. Por que no le importa la salud del pueblo mendocino. Queremos sueldos dignos para no tener que trabajar en dos y tres lugares para llegar a fin de mes. Queremos tener derecho al descanso y a compartir con nuestras familias", denunciaron desde la Asamblea de trabajadoras y trabajadores del Hospital Central.
En Mendoza la Canasta Básica, es decir lo que necesita una familia para llegar a fin de mes, es de $ 58.900. El salario promedio de las y los trabajadores en la provincia se encuentra $ 10.000 por debajo de ese monto. En el caso de las y los trabajadores de la salud es mas grande la diferencia, mientras que una licenciada en enfermería de área covid contratada es de $ 33.000 de bolsillo, mientras que el del resto de los enfermeros contratados es de $ 24.000 en mano.
Esa es la realidad que viven miles de profesionales de la salud en la provincia. Situación que también denunciaron las y los trabajadores de la educación, quienes según un informe difundido por el Sute, el sueldo percibido alcanza para 11 días del mes en el caso de una maestra inicial, 13 días en el caso de una con 10 años de antigüedad y tan solo 10 días en el caso de una celadora.
En el otro extremo, los legisladores perciben dietas 10 veces superiores que quienes todos los días garantizan el acceso a la salud y la educación de todos los mendocinos y mendocinas. Esta desigualdad escandalosa había salido a la luz, cuando el legislador del FIT Lautaro Jiménez denunció que diputados y senadores que sesionaban desde sus casas seguían percibiendo un plus por desarraigo, alcanzando dietas que superan los $ 240.000.
"Queremos sueldos dignos para no tener que trabajar en dos y tres lugares para llegar a fin de mes. Queremos tener derecho al descanso y a compartir con nuestras familias", exigieron las enfermeras del Hospital Central. La convocatoria, impulsada por Sitea, incluyó el reclamo por el pase a planta permanente de todos los contratados, el reconocimiento de la categoría profesional de todos los y las licenciadas y contra la persecución laboral a quienes se organizan en hospitales y centros de salud para hacer oir sus reclamos.