Durante la mañana, alrededor de 50 trabajadores de Jardines de la Usach, paralizaron sus funciones debido al no pago de sus sueldos, exigiendo un aumento base de su remuneración mensual.
Martes 3 de mayo de 2016
Los trabajadores de Jardines subcontratados de la Usach, y que pertenecen a la empresa BHClean, decidieron paralizar sus funciones debido al no pago de sus sueldos. Ni la empresa, ni la universidad han respondido por esto, mientras que los trabajadores no han recibido su remuneración de abril, que debía ser cancelada el 20 de dicho mes.
Fueron alrededor de 50 trabajadores los que decidieron en asamblea paralizar sus actividades. Los trabajadores exigen las siguientes demandas: pago del sueldo adeudado, aumento de sueldo a $340 mil (ganan el sueldo mínimo), camarines, lugares dignos para poder comer, aumento de bonos, unidad con los trabajadores del aseo y reunión con la empresa y la universidad.
Hasta el momento, los trabajadores han recibido apoyo de la Federación de Estudiantes (Feusach), y de jóvenes de distintas carreras, como es el caso de la Consejera Académica de Periodismo y militante de la ACR, Joselyn Encina, quien comentó al respecto: “nos solidarizamos con los trabajadores y nos planteamos contra la explotación y los abusos que cometen tanto la empresa como la universidad. Zolezzi, como rector de esta institución, también es responsable. Llamamos a todos los estudiantes a solidarizar con esta lucha”, aseguró la estudiante.
Los trabajadores se dirigieron a Rectoría, entonando gritos en alusión a sus condiciones laborales y de vida, y emplazando a Zolezzi: “Señor Rector, le pido por un mes que viva con mi sueldo y yo con el de usted”, exigieron. También denunciaron que este 1º de mayo, Día del Trabajador, lo pasaron sin dinero, algo que ni a la empresa y universidad les importó.
Las autoridades acusan “no tener fondos” para solventar las demandas, sin embargo, mientras los trabajadores de Aseo y Jardines de la universidad ganan el sueldo mínimo, el Rector tiene un sueldo cercano a los 9 millones de pesos. Además, durante el verano, la universidad despidió por lo menos a 30 trabajadores, dejando a decenas de familias en la calle.
Este conflicto aún se está desarrollando y los trabajadores se encuentran en reunión con la empresa y universidad, a la espera de que cumplan cada una de sus demandas.
