Es posible que más sindicatos se sumen ya que también se encuentran en medio de negociaciones colectivas.
Martes 21 de septiembre de 2021
Cerca de un centenar de trabajadores de la empresa de micros Subus, parte de Transantiago, se encuentran desde el martes en una huelga legal dentro del marco de su negociación colectiva, en la que exigen mejores condiciones salariales y que no logran llegar a un acuerdo con la empresa.
Esta mañana, incluso un bus bloqueó la salida de alrededor de 200 máquinas de un terminal ubicado en calle José Besa en San Bernardo, mostrando la potencialidad que tienen las y los trabajadores para el funcionamiento de la ciudad.
Los recorridos afectados son el 201, 201e, 271, 203, 203e, 217, 228, 211 y 221, todos correspondientes a la comuna de San Bernardo.
Además, desde el sindicato indican que podrían sumarse más trabajadores de Subus a esta huelga, según señaló el presidente de uno de los sindicatos, Alejandro Aedo, ya que otros nueve están negociando con la empresa.
“Lo que pedimos es mantener el formato de nuestro contrato. La empresa pretende cambiar para el resto de los trabajadores, mediante un anexo de contrato, las condiciones laborales“, afirmó Aedo.
El hecho de que tan solo un sindicato, de una de las empresas de buses que se encargan de movilizar a la clase trabajadora a sus lugares de trabajo, se encuentre en huelga y provoque que se llegue a desestabilizar, de alguna manera, la movilidad de la gran capital, solo es una muestra de la gran potencialidad que pueden llegar a tener las y los trabajadores del transporte.
Los trabajadores de Subus pelean por condiciones salariales más justas y dignas, y están en todo su derecho de hacerlo, pues siempre es necesario luchar por las demandas sindicales de los trabajadores, ya que nunca es suficiente tomando en cuenta que los grandes empresarios solo se enriquecen del trabajo de nuestras familias, cuando estos no le han trabajado un día a nadie.
Ahora, es imposible no imaginarse cómo sería si existiera una gran unidad entre los trabajadores de todas las empresas del transporte público, incluido el Metro de Santiago, junto con otros sectores esenciales de la clase trabajadora como lo son los mineros, los portuarios, los profesores, etc., eso podría desestabilizar al régimen completo, y con esa fuerza las y los trabajadores podrían pelear por mucho más que solo mejoras salariales.
Ese es el camino que nos dejó el Paro Nacional del 12 de noviembre de 2019, donde en medio de una revuelta social donde la clase trabajadora no se encontraba en las calles como sujeto propio, por fin apareció con sus propios métodos para poner en jaque al gobierno y al régimen en su conjunto. Con esa misma unidad es que podemos pelear por todas las demandas de octubre, como lo es una educación de calidad, gratuita, democrática y no sexista, un sistema de salud de calidad e igual para todos, acabar con las AFP, y con el robo del agua, etc. Así como liberar a las y los presos de la rebelión que se encuentran encarcelados por este gobierno asesino.
Benjamín Vidal
Periodista - Universidad de Chile