La Plata. Trabajadores de la República de los Niños: “Queremos nuestros sueldos, no un bolsón de comida”

Las y los trabajadores de los juegos de la República de los Niños decidieron redoblar la apuesta y no dejar que ni barbijo, ni aislamiento obligatorio calle su reclamo: desde el lunes se manifiestan en las puertas del Palacio Municipal, esperan que el intendente Julio Garro les dé una respuesta.

En diálogo con La Izquierda Diario un empleado de la empresa Vica Waikitun, relató: “En los últimos días se presentó el ex socio de Vidal con un proyecto en el que proponía abonar nuestros sueldos hasta que se levante la cuarentena, obviamente seguir él con la concesión y asegurar nuestra continuidad laboral, con todos los empleados en blanco”.

Se trata de Guillermo Caciani, quien aún figura en los papeles como socio de Hugo Vidal, gerente de la empresa que desde 2016 tiene la concesión de los juegos de la República de los Niños. Caciani asegura que en diciembre del año pasado fue despedido por Vidal y ahora quiere obtener él los permisos para el manejo y explotación de los juegos.

El trabajador sostuvo que “el proyecto presentado por el ex socio en el Ministerio de Trabajo fue evaluado por un inspector en la Secretaría de Negociación Colectiva y fue aprobado”. Sin embargo, cuando pasó a la Municipalidad el Secretario de Cultura y Educación no dio respuesta, “Martiniano Ferrer Picado fue quien dijo que cuando el proyecto esté en la Municipalidad iba a hablar con la gente de Legal y Técnica para poder acelerarlo y que tengamos una pronta solución, pero cuando llegaron los papeles se tiró atrás y dijo que nosotros lo estábamos extorsionando por reclamar nuestros derechos”.

Las y los trabajadores denuncian que Hugo Vidal siempre se jactaba de ser primo de María Eugenia y mano derecha de Julio Garro. Que las ganancias millonarias de la República de los Niños podrían estar puestas en su sueldos, aunque claro, primero están los amigos. Parece que la verdadera pandemia son los empresarios.

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“Hicieron una operación mediática en medios periodísticos de la ciudad de La Plata afines al Gobierno, diciendo que se ponían del lado del trabajador y que ofrecían la Secretaría de Servicios Sociales para ponerla a nuestra disposición, cosa que es totalmente mentira”, enfatizó el trabajador. En el mismo sentido agregó: “Nadie se nos acercó a ofrecernos algo. El único que sí lo hizo fue el señor Martiniano Ferrer Picado, que nos dijo que quería solucionar todo, palabras textuales de él, con un bolsón de comida para cada uno. Queremos nuestros sueldos, no un bolsón de comida".

Son 48 trabajadores, algunos deben alquileres y no pueden pagar las cuentas que se acumulan. Dos empleadas están embarazadas, una de ellas cuando fue a hacerse una ecografía a una clínica privada le avisaron que su obra social no estaba al día. Ahí descubrieron que los aportes no fueron hechos desde diciembre.

Buenos amigos, un palacete y el brazo armado del Estado

Desde el lunes se apostaron en las puertas del Palacio Municipal, pasaron días de lluvia y frío en medio de una pandemia, sus derechos son doble o triplemente vulnerados: no les pagan sus salarios, no protegen su salud, no les permiten expresarse. Martiniano Ferrer Picado no sólo los acusó de extorsión, sino que llamó a las fuerzas represivas del Estado.

“Ayer mandaron a Infantería. El personal a cargo nos preguntó qué estábamos haciendo y si nosotros éramos los manifestantes por los cuales llamaron de la Municipalidad. Le pareció una tomada de pelo armar un operativo por 25 chicos que estábamos sentados, tomando la distancia social y todo, esperando una respuesta de Garro”, explicó el empleado, “están buscando maneras de amedrentarnos y amenazarnos, la extorsión es más por parte de ellos que nuestra”.

Asimismo, el trabajador de los juegos de la Repu denunció que desde el jueves intentan comunicarse con Ferrer Picado y no contesta el teléfono, el mismo accionar que Hugo Vidal que les clava el visto en WhatsApp, bloquea a los trabajadores que le reclaman por privado, pero eso sí, en el grupo de trabajadores sigue leyendo los intercambios. Julio Garro directamente no acusó recibo.

En sus días en la Municipalidad se encontraron con otros trabajadores que tienen un reclamo que parece calcado, amigos del Intendente que se quedan con concesiones y no pagan sueldos: “Los compañeros del Restobar Malvinas están en la misma situación que nosotros. Lamentablemente se va destapando una olla en la cual había muchos concesionarios afines y amigos del Intendente y los funcionarios de Juntos por el Cambio que manejan intereses totalmente opuestos a los de los trabajadores”.

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Hoy inició una etapa de conciliación obligatoria en el Ministerio de Trabajo, con un representante de los trabajadores y los socios dueños de la empresa. En la conciliación dejarán de lado a la Municipalidad “por no tener predisposición a colaborar” informó el joven, “cada vez nos ponen más palos en la rueda, nos subestimaron, no pensaron que íbamos a llegar tan lejos con el reclamo por nuestros derechos. Por lo tanto no tiene la competencia necesaria como para poder solucionar el caso, ya quedó demostrado”, finalizó.