×
×
Red Internacional
lid bot

Cultura. Trabajadores de la cultura contra Macron: ola de ocupaciones de teatros en Francia

Desde el viernes 26 de marzo varios teatros ocupados convocan cada viernes las "jornadas de la ira" contra la reforma del seguro de desempleo. Un llamamiento desde los teatros ocupados se dirige a todos los sectores más precarios para exigir el abandono de esta contrarreforma.

Martes 30 de marzo de 2021 16:16

Más de 90 salas teatrales se encuentran ocupadas en Francia por los trabajadores de la cultura. "Viva la Comuna", "!Abajo la reforma del seguro de desempleo!", "Cultura sacrificada: Libertad a los artistas" son algunas de las grandes pancartas que cuelgan al frente del legendario Teatro del Odeón. Delante de este improvisado escenario, en la calle, una roquesta de músicos profesionales y un coro entonan las estrofas de "El pueblo unido jamás será vencido". La música contagia a los trabajadores de diferentes sectores que se han acercado para dar su solidaridad. A todos los une algo: el placer por la musica y la ira con el gobierno de Macron. Lo último que ha desatado la ola de ocupaciones es el nuevo proyecto de reforma del sistema de prestaciones por desempleo, que recorta los derechos de los trabajadores, en especial los más precarios.

Esta reforma, que el Gobierno lleva preparando desde hace tiempo, representa un ataque muy importante a los sectores más precarios. De hecho, la reforma en preparación va a reducir las posibilidades de acceso al seguro de desempleo, al alargar el periodo de trabajo necesario para recibir prestaciones. Si hasta ahora era necesario haber trabajado y cotizado 4 meses de los últimos 24, ahora será necesario haber trabajado y cotizado 6 meses de los últimos 28. A esto se añade que la cuantía de la prestación, que antes se calculaba en función de los días trabajados durante un periodo de 12 meses, se basará ahora en un periodo de 24 meses incluyendo los días no trabajados. Además, la reforma incluye la regresión de las prestaciones a partir del séptimo mes de paro para los salarios superiores a 4500 euros.

El decreto debería publicarse el 1 de abril y la reforma aplicarse a partir del 1 de julio. Así, desde el comienzo del verano, más de 800.000 parados van a ver reducidas sus prestaciones. La reforma llega en plena crisis económica, cuando el número de parados ha aumentado y es probable que se dispare por el aumento de los despidos.

Mientras se perfila un amplio ataque que acentuará la miseria de cientos de miles de personas, las direcciones sindicales están más que calladas y en lugar de preparar un plan de batalla a la altura de la situación, participan en las negociaciones con el gobierno.

Su silencio criminal se siente aún más ante el malestar general y las críticas generalizadas al seguro de desempleo. Desde principios de marzo, la cultura se ha visto sacudida por un movimiento que cuestiona la gestión de la crisis sanitaria por parte del Gobierno, que ha hecho de la cultura un sector “no esencial” y ha permitido que una parte de los trabajadores discontinuos se hundan en una profunda precariedad. Como respuesta, ha surgido la ocupación de teatros por toda Francia, y dentro de ellos se ha perfilado un sector que reclama más recursos para la cultura y, sobre todo, la supresión y el abandono de la reforma del seguro de desempleo.

La importancia que ha alcanzado esta última reivindicación se observa en las alianzas forjadas durante las ocupaciones. En el Teatro del Odéon, por ejemplo, los y las ocupantes se han reunido con trabajadores y trabajadoras de otros sectores, especialmente empleados precarios, maltratados por la crisis sanitaria.

Como explica Laurent Voiturin, del SFA (Sindicato Francés de Artistas-Intérpretes) de Rennes, a Rapports de force: «¿Por qué marchar con los precarios? ¡Pues porque nosotros mismos somos precarios!». En el mismo artículo se le concede la palabra a Joachim Salinger, también miembro del sindicato SFA: «Los temporeros, los trabajadores de la restauración, todas estas profesiones precarias... ¡son los que van a resultar más afectados por la reforma! El gobierno lo dice claramente: ya no acepta que el seguro de desempleo les proporcione unos ingresos dignos durante los periodos en que están sin trabajo. [...] Si no luchamos desde ahora, podemos estar seguros de que este sistema se perderá».

Al parecer, la convergencia y la prolongación de las ocupaciones de los teatros ha tenido un gran impacto. En un llamamiento “a la movilización general contra el proyecto de reforma del seguro de desempleo” publicado el 22 de marzo, los teatros ocupados firmantes recuerdan la situación:

“Mientras la gestión de la crisis sanitaria impide trabajar a millones de personas / Mientras más de un desempleado de cada dos no es indemnizado / Mientras se ha superado la cifra histórica de 10 millones de pobres / El gobierno impone una reforma del seguro de desempleo de una violencia inaudita / Empobrece de forma abrumadora a los más precarios».

A continuación, convocan acciones todos los viernes en todas las ciudades contra el seguro de desempleo. La primera se celebró este viernes 26 y en París adoptó la forma de una manifestación que partió de Port Royal.

La convocatoria y las fechas que se anuncian en contra de la reforma del seguro de desempleo podrían ser la punta de lanza para retomar la lucha contra las medidas del gobierno. Mientras que el Syndeac (Sindicatos de Empresas Artísticas y Culturales) prefiere circunscribir la movilización a una reivindicación por la reapertura de los locales culturales, las diversas convocatorias que están surgiendo en los teatros y la reciente llamada a preparar los viernes de la ira van en otra línea. La de una lucha entre diversos sectores de la clase trabajadora, contra la precariedad y contra los ataques del gobierno. Una vía para construir una respuesta conjunta capaz de hacer retroceder al gobierno. Y para avanzar, las direcciones sindicales no pueden permanecer calladas y deben responder a la ira y preparar un plan de batalla a la altura del ataque.

Por Philomène Rozan desde Francia. Traducción: Natalia