La pandemia no solo ha puesto en la palestra el problema de la salud sino que también una profunda crisis social, que ha dejado a miles de familias sin su sustento familiar. Este es el caso de las y los garzones en el barrio puerto de Valparaíso que en plena pandemia quedaron cesantes y han encontrado en las ollas comunes, una forma de apalear la crisis.
Francesca Arancibia Estudiante de Historia y Geografía, UPLA
Miércoles 3 de junio de 2020
Quienes han pasado toda su vida viviendo en Valparaíso, o quienes han sido a acogidos por la ciudad para poder estudiar en la universidad, sabemos que una parte de Valparaíso, específicamente el sector de barrio puerto, se encuentran concentradas las marisquerías y los restaurantes que son abastecidos por las caletas cercanas. Si hemos visitado Valparaíso, sabemos que al transitar por la calle Serrano se nos acercan más de un par de garzones a ofrecernos si queremos pasar a comer los mejores productos del mar.
Hoy día esos jóvenes y mujeres principalmente que te salían al paso con picardía se encuentran cesantes desde marzo, y hoy día los seguimos viendo por las mismas calles donde te ofrecían pasar a comer, y te siguen abordando con su característico delantal negro y un tarro en la mano contándote que se encuentran sin su fuente de trabajo y pidiéndote si puedes aportarle con alguna moneda para que puedan llevar comida a su casa.
Para hacerle frente a la cesantía que trae consigo el problema del hambre, decidieron organizarse y el día lunes hicieron el llamado a realizar una olla común, poniendo todos sus implementos de cocina a disposición, cocinando y repartiendo ellos mismos a sus propios compañeros de trabajo y a sus familias.
Estos ejemplos debemos articularlos con las luchas que se vienen dando, avanzando en la coordinación obrera y popular, para organizarnos y enfrentar los ataques del gobierno.
Revise el siguiente vídeo, en donde los mismos trabajadores relatan cómo se encuentran en plena pandemia.