"Ilegal pero moral" es la definición que hicieron los trabajadores de Energía de la ciudad francesa de su medida de solidaridad, ante las manifestaciones de los panaderos por las consecuencias de la crisis energética y el aumento de los costos del servicio.
Jueves 26 de enero de 2023 09:09
Renaud Henry, secretario general del sindicato CGT Énergie Marseille, explicó que se trata de una manipulación del contador para que los panaderos puedan tener un precio del 50% o directamente reciban el suministro de manera gratuita. La acción es arriesgada, pero el sindicato considera que aunque es una medida ilegal, es completamente legítima porque las panaderías se ven en la situación de tener que cerrar y despedir a cientos de trabajadores, por no poder afrontar los altísimos costos de insumos y servicios.
Lo llamativo de la acción es que no se trata de la solidaridad entre distintos sindicatos, sino de trabajadores organizados en la CGT local hacia pequeños comerciantes que ven afectados sus negocios por los costos del suministro eléctrico y del gas, en medio de la crisis energética provocada por la guerra en Ucrania. Pero los trabajadores de Energía saben que si este sector del comercio bajara las persianas, muchos empleados del sector serían despedidos.
Su solidaridad refuerza la unidad de distintos sectores en lucha contra la reforma previsional del gobierno de Macron, cuando el gobierno viene de atacar a los huelguistas del sector de Energía y dividirlos de los panaderos que salieron a movilizarse esta semana por sus propios reclamos.
La medida "ilegal, pero moral" se convierte en un fuerte símbolo de las acciones que podrían multiplicarse en este movimiento contra la reforma previsional que afecta al conjunto de la clase trabajadora francesa, para afianzar las alianzas con todos los sectores arruinados por las consecuencias de la política del gobierno y la crisis, mostrando el poder de los trabajadores para hacer que la sociedad funcione en interés de todos.
I.V.