La campaña "trabajadores de Starbucks unidos" ha comenzado exitosamente, durante unos meses, en más de 230 locales ha surgido la sindicalización, especialmente, en EEUU. Para hacernos una idea, una manifestación parecida en Seattle ocurrida en febrero, atrajo a solo 200 personas.
Sábado 31 de diciembre de 2022
El Gerente general de la empresa, Howard Schultz, se ha paseado por los medios de comunicación estadounidenses, muy preocupado de la situación, según él la campaña de sindicalización se sentía como un ataque al trabajo de su vida. En discursos anteriores a sus empleados, había presentado al sindicato como "un grupo que intenta llevarse a nuestra gente", una "fuerza externa que está tratando desesperadamente de interrumpir nuestra empresa" y "un adversario que amenaza la esencia misma de lo que "nosotros" creemos que es verdad".
Lo cierto es, que estas jornadas de sindicalización se enmarcan en una situación económica de recesión e inflación a nivel mundial, donde las políticas de ajuste de los gobiernos capitalistas, han repercutido directamente en los bolsillos de millones de trabajadores. Esto, a grandes rasgos, ha causado que situaciones como persecuciones sindicales, no poder ir al baño, salarios por debajo de la inflación, discriminación racial, sexo genérica, se tornen en un ambiente intolerable.
En nombre de los inversionistas el CEO Schultz justifica; "no entendía cómo había cambiado el país y sus vidas." y se toma la articulación de trabajadores como algo personal declarando en el auditorio de la sede global de la compañía; "Sé lo que se ha necesitado para construir este lugar. Sé lo que está en juego en este momento", "Y tenemos que demostrar... para aparecer de una manera diferente". Declaraba en un artículo de The Washington Post.
Estos empresarios se ubican "en el lado bueno del capitalismo estadounidense", pero, volviendo a un comentario del periódico "El Vesnik Evropi", en un artículo que trata exclusivamente del método de El Capital, (número de mayo de 1872) puesto en las palabras finales a la segunda edición, en 1873 por el propio Carl Marx:
"Marx se preocupa de una sola cosa; de demostrar, por medio de una exhaustiva investigación científica, la necesidad de determinado orden de relaciones sociales y de constatar, del modo más impecable posible, los hechos que le sirven de punto de partida y apoyo. Le basta plenamente con probar, luego de demostrar la necesidad del orden actual, la necesidad de otro orden, hacia el que aquél (el capitalismo) tiene que inevitablemente que derivar, independientemente si se piensa o no al respecto, de si se está o no consciente de ello. Marx concibe el movimiento social como un proceso natural e histórico, regido por leyes que no solo son independientes de la voluntad, consciencia e intención de los hombres, sino que además determinan su voluntad, consciencia e intenciones..."
En otras palabras, en su prólogo a la primera edición de el Tomo 1 libro 1 de El Capital, en julio de 1867, Marx explica;
"No presento las figuras del capitalista y del terrateniente, en modo alguno, de color de rosa. Pero aquí tratamos de personas solo en la medida en que son personificación de categorías económicas, exponentes de determinadas relaciones e intereses de clase. Desde mi punto de vista, que enfoca el desarrollo de las formaciones económicas de la sociedad como un proceso natural e histórico, con menos razón que desde otro cualquiera, se puede hacer responsable a un individuo de relaciones de las que él es producto social, por más que se alce subjetivamente sobre ellas. En el campo de la economía política la libre investigación científica no solo se enfrenta al enemigo que le sale al paso en otros terrenos. La naturaleza particular de la materia que aborda levanta contra ella y lanza a la batalla las pasiones más violentas, mezquinas y odiosas que anidan en el pecho humano, las furias del interés privado. "
En este caso, dentro del contexto económico actual, distinto claramente, al de 1873 y la lucha que saludamos desde Chile, de lxs trabajadores de Starbucks, son reveladoras las últimas palabras con las que cierra Marx, sus palabras finales a la segunda edición (24 de Enero de 1873);
"Donde con mayor fuerza se le hace patente al Burgués el movimiento contradictorio de la sociedad capitalista, es en los altibajos del ciclo periódico recorrido por la industria moderna, cuyo punto culminante es la crisis general. Esta crisis se acerca nuevamente, aunque el ciclo se encuentra en sus estadios iniciales, y dado su carácter multifacético y la intensidad de su impacto, hará aprender la dialéctica incluso a los favorecidos del nuevo Sacro imperio prusiano-alemán."
Las condiciones laborales son las primeras víctimas en un escenario de recesión económica, las políticas de ajuste monetario, implican reducir el consumo (de las grandes mayorías) y también, cargar los costos de producción en recortes salariales y de derechos laborales y democráticos (salud, educación, etc). Sin dudas, la "generación U" demuestra en los tiempos actuales un ejemplo de no resignación a la dominación capitalista, tanto en EEUU como en Latinoamérica, dónde tuvo lugar un encuentro internacional de trabajadores de comida rápida el 10 de Octubre, un fenómeno a estudiar y apoyar a nivel internacional, con una juventud precarizada y combativa a la cabeza.