La tarde de este miércoles, un tribunal colegiado revocó la suspensión de obras del aeropuerto de Santa Lucía, mismas que comenzarán a partir de este jueves 17.
Óscar Fernández @OscarFdz94
Jueves 17 de octubre de 2019
El proyecto del aeropuerto en Santa Lucía, al nor-oriente de la Ciudad de México, se volvió el foco de atención luego de que, tras la victoria de Andrés Manuel López Obrador y la subsecuente consulta ciudadana, se cancelara el megaproyecto original del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, controversial por llevarse a cabo en tierras ejidales y humedales del Lago de Texcoco, donde, como detalla un estudio de César Enrique Pineda, podía poner en riesgo la seguridad de los pasajeros por el paso de aves migratorias.
La propuesta del presidente serían tres aeropuertos: el actual de la Ciudad de México, el Aeropuerto Internacional Benito Juárez, el Aeropuerto Internacional Adolfo López Mateos de Toluca (Estado de México) y el aeropuerto de la base de Santa Lucía. En los planes de la Cuarta Transformación, Santa Lucía tendría una ampliación para permitir el aterrizaje de naves comerciales, pero ello también trajo disputas con los sectores que habían hecho inversiones en el NAICM de Texcoco.
Entre ellos está un "colectivo" denominado #NoMásDerroches, en el que figuran gente como Claudio X. González y la COPARMEX, quienes habían interpuesto amparos contra la construcción en Santa Lucía y exigieron al gobierno la continuidad del proyecto de Texcoco. Sin embargo, el último de los amparos fue revocado por el Décimo Tribunal Colegiado en materia Administrativa de la Ciudad de México.
Al darse a conocer el fallo, la tarde de este miércoles el presidente se reunió con Javier Jiménez Espriú, Secretario de Comunicaciones y Transportes para informar que las obrar comenzarían a partir de las 10AM de este jueves, tal y como lo había planteado el pasado 7 de octubre cuando dijo que “en cuanto digan: no proceden los amparos (judiciales que pesan sobre la obra) nos vamos al siguiente día a dar el banderazo de inicio de obras”.
Los simpatizantes más leales del Morena dirán que se trata de una victoria, no tanto así las comunidades aledañas de Santa Lucía, quienes afirmaron que "se sentían traicionados" por no respetar las mesas de trabajo, la voluntad y posturas de aquellos que viven cerca de la base aérea.
A esto además se añade la oposición de grupos ambientalistas, quienes, sobre la base de estudios de impacto ambiental de la SEDENA, CONAGUA y otras instancias, han señalado que el proyecto del presidente afecta los mantos acuíferos de la zona y no contempla la presencia del Cerro de Paula.
Lo que queda de manifiesto es que, ya sea en Santa Lucía o en Texcoco, la construcción de los aeropuertos no se basa en las necesidades de la población, sino en cuánto ganan los grupos empresariales que obtienen las licitaciones y concesiones para realizar las obras de infraestructura.
Óscar Fernández
Politólogo - Universidad Iberoamericana