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Red Internacional
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Genocidio e impunidad. Tribunal de La Plata liberó a uno de los asesinos de la hija de Estela Carlotto

Sin esperar a que en diciembre la Corte Suprema se expida contra el 2x1 para Rufino Batalla, el TOF 1 de la capital bonaerense benefició al genocida por haber cumplido dos tercios de su condena.

Miércoles 14 de noviembre de 2018 17:00

Este lunes el Tribunal Oral Federal Nº1 de La Plata ordenó la excarcelación de Rufino Batalla (71), el exagente civil del Destacamento de Inteligencia 101 de La Plata condenado en 2014 por decenas de crímenes de lesa humanidad, entre ellos el asesinato de Laura Carlotto (hija de la actual presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo) y de Olga Casado.

El fallo que beneficia al represor, firmado por los jueces Germán Castelli, Pablo Vega y Alejandro Esmoris, le permitió a Batalla salir de la Unidad 10 de Formosa y volver a su casa de la misma ciudad, de donde es oriundo. El argumento es que cumplió dos tercios de su condena por los crímenes cometidos en el centro clandestino de detención La Cacha, según informó este miércoles la periodista Luciana Bertoia desde El Destape.

Así, Batalla esperará desde su casa que el 4 de diciembre la Corte Suprema de Justicia de la Nación se expida sobre su pedido de aplicación del “2x1”. Sus defensores habían solicitado el beneficio en 2017 al TOF 1 de La Plata, después de que la Corte dictó el fallo favorable en ese sentido para el genocida Luis Muiña.

Tras el escándalo generado por aquel fallo y el rechazo popular con movilizaciones masivas, que motivó que el Congreso dictara la ley 27.362 que prohíbe el 2x1 para el caso de delitos de lesa humanidad, el 15 de mayo de 2017 el TOF 1 de La Plata rechazó el planteo de Batalla y el caso llegó al tribunal supremo.

Este lunes, mientras en La Plata se dictaba el fallo de excarcelación de Batalla, el Centro de Información Judicial publicaba el calendario de próximas sentencias de la Corte. Allí dice que el 4 de diciembre resolverán sobre la “aplicación de la ley del 2x1 en las causas de delitos de lesa humanidad” referida a “Batalla, Rufino”.

Según varias fuentes, los jueces Horacio Rosatti, Ricardo Lorenzetti y Juan Carlos Maqueda ya se habrían definido por votar en contra de la aplicación del 2x1 para delitos de lesa humanidad. Rosatti, vale recordar, había votado a favor en el caso Muiña, pero ahora cambiaría el voto en función de la nueva ley 27.362. Resta saber qué votarán Elena Highton de Nolasco y el presidente de la Corte Carlos Rosenkrantz. Con ese pronóstico, el represor Batalla recibiría un revés que, al menos en teoría, debería devolverlo a prisión.

Batalla fue condenado junto a otros 14 represores (entre militares, policías, penitenciarios y civiles) el 24 de octubre de 2014. En su caso se lo condenó a la irrisoria pena de 13 años de prisión por 55 secuestros, 71 torturas y por participar en los homicidios de Laura Carlotto y Olga Noemí Casado.

Tras estar prófugo del Poder Judicial durante un tiempo, Batalla fue detenido con prisión preventiva a mediados de julio de 2010 y esperó encarcelado el juicio oral que comenzaría a fines de 2013.

Ahora, para dejarlo libre, los jueces de La Plata le pusieron como únicas condiciones al espía, secuestrador, torturador, asesino y exprófugo que no se ausente de su domicilio “por más de 24 horas sin autorización del Tribunal” y que una vez al mes se presente en el Patronato de Liberados. Y como si fuera un chiste de muy mal gusto, que no tenga contacto con sus víctimas.

Luego de la sentencia de 2014, la querella de Abuelas de Plaza de Mayo pidió recaratular la condición de “partícipe secundario” de Batalla en los delitos por los que se lo condenó a “coautor” y pidió una cadena perpetua por crímenes de lesa humanidad. Ese pedido aún está en consideración de la Cámara Federal de Casación.

Vale recordar que en octubre el mismo Tribunal Oral en lo Criminal Federal Nº 1 de La Plata ordenó la excarcelación de otro de los represores condenados por el crimen de Laura Carlotto. Se trata de Raúl Espinoza, un civil que fue espía de Inteligencia del Ejército y, aunque había sido condenado a solo 13 años como Batalla, lo beneficiaron con la excarcelación por “haber cumplido el tiempo suficiente de detención”.