Se trata de Luis Di Giácomo, Diputado por el partido gobernante de Río Negro, Juntos Somos Río Negro. Acudiendo a un supuesto “realismo político”, el legislador y todo su bloque aprobaron la sumisión al FMI con frases ridículas. El historial de un legislador que sabe cómo actuar en favor del empresariado.
Viernes 11 de marzo de 2022 14:56
La típica de un legislador conservador en el recinto: celebró el “consenso en el que todos hayan tenido que ceder algo”. Obviamente, los únicos que finalmente tendrán que ceder son los bolsillos del pueblo trabajador. Se trata de Luis Di Giácomo, uno de los tantos parlamentarios de los que nadie sabe qué hace en el recinto, solo apretan los botones de las votaciones según mande la “rosca” entre los dos lados de una grieta que ya ni siquiera es tal, porque ahora manda el FMI para ambos lados.
Entre sus argumentaciones, el señor acudió a frases hechas tales como “en el caso de nuestro bloque representamos provincias a las cuales gobernamos y debemos gobernar desde la ética de la responsabilidad”. Le faltó una palabra a su “ética”: la ética capitalista. En su afán de seguir con sus argumentaciones dignas, saltó contra “quienes en todo caso hacen discursos desde lugares ideológicamente ideales pero que resulta que después no encuentran su aplicación en esa realidad”. Con la lógica casi calcada del “correte trosco, estamos gobernado” cerró la idea con “yo no conozco que exista Troscoslavia”.
Una chicana, sin lugar a dudas, contra quienes desde la izquierda representaron la oposición que en las calles llenó la plaza con decenas de miles en contra del acuerdo con el FMI. Pero más lamentable es lo que siguió diciendo a continuación: “Este es el país que se viene y tenemos la oportunidad de que la mayoría llegue a un acuerdo que puede ser beneficioso para salir de la crisis”. Cuando la oligarquía y la burguesía nacional hablan de algo benficioso es porque están por hundir nuevamente al país, en pos de cubrir sus beneficios.
Breve racconto
Di Giácomo, con sus pares del oficialismo rionegrino tienen su breve historial de colaboraciones con “responsabilidad y ética”. El peronismo eliminó del presupuesto nacional 2021 el IFE, un aporte insuficiente pero muy necesario para millones de personas en el país que perdieron o no pudieron seguir trabajando por las restricciones impuestas en pandemia. Ese presupuesto de ajuste fue aprobado con los votos de Di Giacomo y el Senador Weretilneck, su jefe político. Solo el Frente de Izquierda votó en contra.
El discurso de Juntos Somos Río Negro se la da de “provincialista”, siempre en aras del bienestar de las y los rionegrinos, como suelen decir en sus sketch de campaña. Veamos: las consecuencias de haber votado favorablemente la Ley de Presupuesto 2021 la sufrieron las y los trabajadores temporarios del turismo o de la fruta. Ese voto también contribuyó con una rebaja del 10% en el presupuesto para Salud. Entonces, ¿de qué “rionegrinos” hablaba? De los dueños de la tierra, como Joe Lewis, a quien su partido defiende a capa y espada.
La lista sigue, o acaso, ¿Quiénes votaron a favor de la suspensión de la movilidad jubilatoria que nuevamente confiscaba parte del magrísima plata que perciben los y las jubilidadas? Allí estuvieron los botones de JSRN en apoyo de ese ajuste. Ni hablar de la susodicha ley de “aporte solidario” que destinaba gran parte del monto recaudado para el Fracking. Allí también estuvieron con el gobierno y la oposición gorila votando con “ética y responsabilidad” por su aprobación.
Una perlita más: Di Giácomo presidió en 2021 la Comisión de Prevención de Adicciones y Control del Narcotráfico. Su opinión respecto del tema es la siguiente: “todas las drogas envenenan”. ¿Legalización integral del cannabis? Este señor es el dueño de la llave del cajón en que duerme ese proyecto.
Di Giácomo en Diputados y Weretilneck en el Senado negocian abiertamente cualquier ley que le resulte importante al peronismo y al macrismo. Donde mande el capital, allí están prestos a votar. Todo lo contrario a quienes desde las bancas del Frente de Izquierda y en las calles, luchamos porque la crisis la paguen los que se fugaron la plata, no el pueblo trabajador.
