El presidente de Estados Unidos dijo ayer que continúa con sus planes de aplicar aranceles del 25 % a las importaciones de acero y del 10 % a las de aluminio, pero que será flexible para cambiar los porcentajes a algunos países.
Viernes 9 de marzo de 2018
El presidente de Estados Unidos dijo el jueves que sigue apegado a sus planes de aplicar aranceles del 25 % a las importaciones de acero y del 10 % a las de aluminio, pero que será flexible para cambiar los porcentajes a algunos países.
Esto es lo último que dijo Trump luego de que la Casa Blanca sembrara una confusión general abriendo la posiblidad de que México y Canadá (los principales exportadores de acero junto con Brasil) quedaran exentos ya sea por arreglos del TLC favorables a Estados Unidos o por un período de 30 días hasta la nueva ronda de negociación del NAFTA.
Luego de la crisis abierta con la renuncia de su principal asesor económico Gary Cohn, la Administración estadounidense abrió la puerta a las exenciones. "El presidente indicó que si podemos resolver algo con Canadá y México, quedarán exentos. No es inconcebible que otros puedan quedar exentos sobre una base similar", aseguró el secretario de Comercio, Wilbur Ross, en una entrevista con la cadena televisiva CNBC.
"Me quedaré con 10 y 25 (por ciento) inicialmente. Tendré derecho a subir o bajar, dependiendo del país, y tendré derecho a descartar países o agregar países", dijo Donald Trump -cual si se tratara de un juego de mesa- a periodistas al comienzo de una reunión de Gabinete en la Casa Blanca.
El mandatario agregó que será “justo y flexible” sobre el tema y al mismo tiempo “protegerá a los trabajadores estadounidenses”.
Los planes de Trump han irritado a los aliados de Estados Unidos y generan temores a que se desate una guerra comercial.