Nacional. Tucumán: sigue la crisis de un régimen ilegítimo

Fotografía: La Nación

Durante la tarde de ayer sesionó el Congreso del Partido Justicialista, en el mismo aprobaron un duro documento contra el radical José Cano y Domingo Amaya. Al mismo tiempo definieron realizar una movilización una vez que finalice el escrutinio definitivo o cuando el mismo este lo suficientemente avanzado.

Del Congreso del PJ estuvo ausente su presidenta, Beatriz Rojkes de Alperovich, pero contó con la participación de la plana mayor peronista. Curiosamente, ninguna de las principales autoridades partidarias participó de la última elección dentro del Partido Justicialista sino que lo hicieron desde otros partidos acoplados al Frente para la Victoria. El otro dato de color es que en el Congreso no se refirieron a Germán Alfaro, quien habría ganado la intendencia capitalina como parte del acuerdo opositor, pero que el oficialismo apuesta a que vuelva a poner los pies en el plato. Al fin y al cabo para un peronista no hay nada mejor que otro peronista.

Hacia el anochecer, José Cano y Germán Alfaro realizaron una movilización desde Plaza Urquiza hacia Plaza Independencia que finalizó con un acto cuyo único orador fue Cano. Desde arriba del colectivo de campaña que ingresó a la explanada de la Casa de Gobierno, Cano se limitó a solicitar que el gobierno convoque a la Legislatura a reformar la Ley electoral. Durante el acto se expresó también por la libertad de los militantes del Partido Obrero detenidos. El PO y el MST fueron las únicas organizaciones de izquierda presentes en la movilización convocada por el Acuerdo por el Bicentenario.

Una posición independiente

Desde el PTS no participamos de la movilización, ya que es necesario desarrollar una posición independiente tanto de Manzur como de Cano. El discurso de Cano en referencia a “defender la democracia” es tan hipócrita como el de Manzur cuando dice que “hay que respetar la voluntad popular”.

La realidad es que mientras Tucumán siga siendo una de las provincias más pobres del país con el 40% de la población bajo la línea de pobreza, donde la mitad de los trabajadores lo hace de forma precarizada y en negro, donde 60 mil trabajadores temporarios deben migrar año a año en busca de trabajo, no se puede hablar de democracia.

Por eso desde el PTS en el Frente de Izquierda sostenemos que es necesario convocar a nuevas elecciones, pero para realizar una Asamblea Constituyente Libre y Soberana, donde se elija un diputado cada tres mil electores, que ponga fin al sistema de acoples (que no puede modificar la Legislatura como sugiere Cano) pero donde centralmente se discuta cómo resolver los problemas estructurales de la provincia.

Las movilizaciones convocadas por Cano y por Alperovich no apuntan a conquistar un salario mínimo igual a la canasta familiar, ni el pase a planta de los trabajadores precarizados y en negro, como tampoco a realizar un verdadero plan de obras públicas controlado por los trabajadores para evitar inundaciones y terminar con el hacinamiento. Ellos pretenden gobernar para el gran empresariado, el mismo que les financia sus millonarias fortunas. Son quienes necesitan mantener una gran masa de mano de obra barata. Cano, Manzur y los cientos de candidatos acoplados a sus listas quieren seguir gobernando para los capitalistas y vivir como ellos. Por eso, una Asamblea Constituyente debe discutir la necesidad de que todos los funcionarios, jueces y legisladores cobren igual que una docente.

En este marco, creemos que es un error la participación de los compañeros del Partido Obrero en la movilización y acto convocado por Cano y Alfaro. Hemos dado juntos una correcta pelea por la liberación de los compañeros detenidos y seguiremos peleando por su total desprocesamiento. Pero para darle una salida a la crisis política abierta es necesario que el Frente de Izquierda se ubique de forma independiente tanto del gobierno como de la oposición patronal.