Cientos de personas, entre estudiantes, docentes y no docentes, se reunieron en la Universidad Nacional de Quilmes para definir los pasos a seguir de cara a la Marcha Nacional Universitaria del jueves.
Martes 28 de agosto de 2018 16:59
La semana en la UNQ arrancó con una masiva asamblea interclaustro para intercambiar sobre cómo continuar la lucha por la defensa de la educación que se viene desarrollando en todo el país. Comenzaron los docentes, contando la situación de las negociaciones con el gobierno nacional y la mísera oferta de aumento salarial que recibieron, casi sin cambios con respecto a la anterior propuesta.
Luego fue el turno de los estudiantes, quienes plantearon que hay que seguir de pie más allá de la marcha del 30 de agosto. Explicaron cómo se fugan millones de dólares hacia los especuladores y por el pago de la deuda externa, y que es necesario pelear porque ese dinero sea destinado a educación, salud, vivienda y hacia todas las necesidades de los trabajadores y los sectores populares.
Se resaltó también cómo la marea verde, que salió a las calles por el derecho al aborto, hoy se pone de pie en las universidades; que por eso es necesario levantar la separación de la Iglesia del Estado, denunciando el lobby que hace esa institución contra los derechos de las mujeres y explicando que la plata que se gasta en el sueldo de los curas tiene que ir hacia el salario de las y los docentes.
También plantearon que hay que democratizar cada espacio de lucha para convertirlo en un espacio de deliberación y decisión de toda la comunidad educativa. Por último, se propuso que la asamblea vote marchar a Plaza de Mayo, orientando toda la fuerza de la movilización del jueves hacia el poder político, cuyos representantes son los que llevan adelante el feroz ajuste en curso; explicaron que la marcha no podía terminar en el Ministerio de Educación -como quieren las conducciones de los gremios docentes y el kirchnerismo-. La votación por este punto fue divida, ganando por mayoría la moción de ir a la Plaza de Mayo.
El momento más emocionante llegó cuando hablaron los trabajadores despedidos de la multinacional Coca-Cola en lucha, llamando a la unidad en las calles de obreros y estudiantes. Afirmaron que la pelea es la misma, y que no hay que permitir familias en las calles nunca más. Cuando terminaron fueron aplaudidos enérgicamente por toda la comunidad educativa presente.
Como explicaron las y los estudiantes, luego del abrazo queda nuevamente demostrado que este es el camino a seguir: el de la unidad de los estudiantes, docentes y no docentes para torcerle el brazo a este gobierno.
La asamblea finalizó votando las siguientes resoluciones: