Provincia de Buenos Aires. Un camionero tenía vencido el permiso para circular: la Policía de Berni casi le saca un ojo

Fabián Andina es el camionero que el domingo fue víctima de un brutal ataque por parte de la Policía Bonaerense, la fuerza que está al mando del (excarapintada) Sergio Berni, ministro de Seguridad de Axel Kicillof.

Andina se dirigía esa tarde a cargar combustible en su camión, acompañado de su esposa. Accidentalmente tiró un "conito" naranja de un control policial, motivo por el cual tres uniformados lo persiguieron, le pidieron los papeles y el permiso de circulación en el marco de la cuarentena.

Hubo una discusión y tres policías terminaron atacándolo con violencia, pegándole piñas y apretándole un ojo con el dedo. Andina terminó internado con 22 de presión.

Te puede interesar Bregman denunció el preocupante crecimiento de la violencia estatal

La paradoja es que quien terminó encausado fue el propio Andina, que ahora deberá enfrentar cargos por "atentado y resistencia a la autoridad" y "lesiones" mientras que su esposa lo hará por "atentado a la autoridad".

Hasta ahora no hay ningún efectivo imputado por el hecho, aunque el fiscal de la causa analiza el caso y, según trascendió, podría haber "una sanción" en caso de que se considere la agresión al camionero o, eufemísticamente, "exceso de fuerza".

La Policía Bonaerense (hoy al mando de Kicillof y Berni) despliega su brutalidad envalentonada por su conducción política, acechando en los barrios pobres del conurbano golpeados de lleno por la pandemia, rodeados por cientos de efectivos y hasta de militares del Ejército.

Lo ocurrido con Andina no es un hecho aislado ni mucho menos, es parte de una práctica sistemática de todos los gobiernos que recrudece ante los poderes que les fueron asignados de mayor control social ante la crisis sanitaria.

Te puede interesar La violencia policial en el ADN del Estado