Crece el repudio contra el Gobierno por sus posiciones sobre la dictadura. Macri tuvo que retroceder con la movilidad del día de la memoria. La izquierda denunció el tarifazo y continúa la lucha contra los despidos.
Jueves 2 de febrero de 2017
A partir de las declaraciones pro dictadura del funcionario de Cambiemos, Gómez Centurión, las críticas y el repudio a Macri y sus funcionarios aumentaron de manera exponencial. En este contexto el presidente tuvo que retroceder con el decreto que modificaba al 24 de Marzo como feriado móvil. El gobierno intenta recrear un clima de reacción para profundizar el ajuste y hacer pasar los despidos con represión. A la vez que oficialistas y opositores atacan los derechos de la juventud y los salarios de los trabajadores.
El nuevo tarifazo anunciado por Aranguren es otro golpe al bolsillo de los sectores populares, una verdadera estafa contra el pueblo trabajador, mientras las empresas de energía se llenaron de plata durante el gobierno anterior y el actual con los subsidios millonarios del Estado.
En la industria hubo más despidos y suspensiones y el Gobierno nacional junto a los gobernadores quieren pactar un tope salarial del 18% para los docentes, con el propósito de que funcione como caso testigo para el resto de las paritarias. A todo esto, la CGT mantiene la tregua con Cambiemos sin llamar a un paro general, dándole la espalda a los trabajadores. Mientras, la izquierda y el sindicalismo combativo están en pie de lucha contra los despidos. Como lo vienen demostrando los trabajadores de AGR-Clarín contra una patronal que se enriqueció durante la dictadura y todos los gobiernos democráticos.
Entretanto Cambiemos, el massismo y el FPV avanzan en los municipios con una política represiva contra los trabajadores y la juventud. Todos coinciden en colmar las calles de policías y gendarmes como continuidad con la política represiva del gobierno Kirchnerista. La misma policía y fuerzas federales responsables del espionaje sobre el pueblo, el gatillo fácil y partícipes del pequeño y gran delito. Por otra parte, varios de sus integrantes en servicio provienen de la última dictadura militar.
Sin embargo se destina un presupuesto de miseria para educación y salud, mientras que la inversión presupuestaria en seguridad fue lo que más aumentó. En algunos municipios como en San Martín donde está el FPV, hasta se multiplicó por 4 cuando hay crisis edilicia en las escuelas y recortes en comedores y hospitales.
Como respuesta a la situación nacional el PTS en el Frente de Izquierda denunció la política reaccionaria de Macri, el ajuste y la represión del Gobierno nacional, de los gobernadores e intendentes.
Sólo en las calles y con la unidad de los trabajadores es posible derrotar el ajuste y los despidos.
