La huelga comenzó este lunes y afecta a las principales zonas del territorio. La desocupación, falta de servicios públicos y otras demandas de carácter social son el motor de las protestas.
Martes 28 de marzo de 2017 11:59
La tensión social en la Guayana Francesa se ha agudizado desde este lunes con una huelga general para denunciar el desempleo y las pésimas condiciones de vida que aquejan a la mayoría de la población en este territorio francés de ultramar.
El Gobierno francés, admitió que la situación en este territorio donde viven más de 260.000 personas es "tensa", y realizó un llamado a la calma.
Desde hace varios días la Guayana Francesa, afectada por una tasa alta de desempleo, vive un movimiento de descontento social a menos de un mes de las elecciones presidenciales francesas.
La movilización que amenaza con paralizar su economía, vienen creciendo desde el jueves con el bloqueo de una docena de carreteras y el cierre de escuelas.
Las manifestaciones y bloqueos ya habían obligado a la empresa Arianespace a aplazar el lanzamiento, previsto el martes, de un cohete Ariane 5 que iba a poner en órbita un satélite brasileño y otro surcoreano.
Pese a que el Gobierno francés envió una misión interministerial para dialogar con los manifestantes, 37 sindicatos agrupados en la Unión de Trabajadores Guayaneses (UTG) aprobaron el pasado sábado una "huelga general ilimitada" a partir de este lunes.
Las protestas comenzaron alrededor del corazón económico del territorio, un símbolo del carácter colonial de la relación entre París y la Guayana francesa: Kourou.
Las principales reivindicaciones planteadas por el movimiento son fundamentalmente sociales. Es que el carácter profundamente desigual se vive en la Guayana más que en otra parte del territorio francés.
La tasa de desempleo, afecta a una cuarta parte de la población, en especial afectando a los jóvenes, más del 40% de los desocupados son menores de 25 años. El empleo, la defensa de los servicios públicos, salarios, ingresos de los pequeños agricultores, es lo que está en el centro de las demandas del movimiento.
La misión interministerial francesa anunció la contratación de más policías y una ayuda urgente de 60 millones de euros para el hospital de Cayena, la capital, muy endeudado.
"Por el momento, las respuestas de la delegación se centran en la salud y la seguridad. Nosotros pedimos un plan de desarrollo y no pequeñas medidas", afirmó un portavoz de los sindicatos.
Los movimientos sociales y los sindicatos que encabezan el movimiento se niegan a reunirse con la misión interministerial. La ministra de Ultramar, Erika Bareigts, rechazó el lunes la posibilidad de viajar a la Guayana "hasta que no se reúnan las condiciones para un diálogo".
La crisis en el territorio de ultramar francés, irrumpió en la campaña electoral, desde el Gobierno denunciaron en un comunicado la "instrumentalización con fines electoralistas" de la situación por parte de algunos candidatos a las elecciones presidenciales, especialmente el conservador François Fillon y la ultraderechista Marine Le Pen.
Las declaraciones de los principales candidatos a la presidencia francesa, ocultan que la principal fuente de la actual crisis en Guayana es es la situación colonial a la que esta sometida este territorio, relegado a una zona de segunda por el estado imperialista francés.