El apoyo al magisterio se muestra cada día más político. “Mejor morir de pie que vivir arrodillados” es la frase que cierra la manta de la marcha de los pobladores de Santa Cruz y San Gregorio en Xochimilco, al sur de la ciudad.
Domingo 3 de julio de 2016
En estos momentos se manifiestan las madres de familia de Santa Cruz y San Gregorio, ambos pueblos de Xochimilco. Ellas, junto a vecinos de la zona y sus familias, fueron el sector de combativas madres que garantizaron el cierre de las escuelas en el enorme proceso que se dio en esa localidad en el año 2013.
A esta significativa movilización convocada desde Tulyehualco a la Glorieta de Vaqueritos en la misma de delegación, se sumaron los maestros y las maestras que vienen organizándose en el ya denominado Frente Sur de la Ciudad de México. Uno de los primeros reagrupamientos que comenzaron a emerger cuestionando la reforma educativa, tomando como ejemplo a los maestros de Chiapas y Oaxaca, y en repudio a la brutal represión de Nochixtlán el pasado 19 de junio.
El clima que se vive en la principal ciudad de nuestro país, epicentro de los principales poderes políticos de México, no sólo es de total apoyo al proceso magisterial en ciernes y expresa en primer término la contundente adhesión a la necesidad de abrogar la reforma educativa, sino que trae consigo el enorme repudio al gobierno de Enrique Peña Nieto y su políticas de hambre, miseria y represión a la clase trabajadora mientras favorece a la clase dominante.
