Villarruel aprovechó la conmemoración del Día de la Lealtad peronista para rendir homenaje a Estela Martínez de Perón, más conocida como Isabel. Lo hizo junto a Claudia Rucci, hija del sindicalista y hombre fuerte de la derecha peronista por esos años. "Vicepresidente como yo y Argentina bien nacida" escribió en sus redes, refiriéndose a una de las figuras más emblemáticas de la represión ilegal y la Triple A en los años 70.
Juan Manuel Astiazarán @juanmastiazaran
Viernes 18 de octubre 02:05
Victoria Villarruel junto a Claudia Rucci descubren el busto de Isabel Perón en el Salón de las Provincias del Senado de la Nación
Victoria Villarruel sigue empecinada en construir su propia agenda, separándose de la agenda presidencial y casi siempre ligada a los reclamos de mayor impunidad de los militares genocidas o incluso con actos que bordean la reivindicación de la represión estatal durante la última dictadura militar.
Este jueves, en el marco de la conmemoración del Día de la Lealtad peronista, la vicepresidenta aprovechó la ocasión para compartir en sus redes un video junto a Estela Martínez de Perón, más conocida como Isabel. Durante su último viaje a Europa, en el que visitó el Vaticano y fue recibida por el Papa, aprovechó para hacer escala en España donde actualmente reside la exesposa de Juan D. Perón.
"En un día cómo hoy, en donde se habla de lealtad, quiero reivindicar su figura", tuiteó Villarruel junto a cuatro fotos en sus redes. Además, publicó un video en la que no solo reivindica su accionar durante su breve presidencia sino que rescata que su mandato "recuerda la importancia de la lealtad y la firmeza en la conducción del país".
La provocación (otra más y van) por un lado cumple el rol de jugar dentro de la interna del gobierno. De hecho le valió las críticas de Patricia Bullrich, quien señaló que "evidentemente está intentando un camino propio, separado del equipo de Gobierno". Pero por otro lado busca darle más fuerza a su relato acerca de qué fue lo que sucedió en aquella época.
Villarruel siempre ha sido una defensora (apologista más bien) de la familia militar, y a lo largo muchos años ha militado una suerte de "empate", equiparando las acciones de distintos grupos como Montoneros o el ERP a los crímenes de lesa humanidad que cometieron los militares genocidas que ella defiende. Ahora, en un paso distinto pero que apunta en el mismo sentido, directamente se embandera en una reivindicación de uno de los íconos de la represión ilegal y paraestatal que tuvo lugar por aquellos años bajo el accionar de la Triple A (Alianza Anticomunista Argentina), la cual estuvo estrechamente ligada a Isabel Perón y a su ministro de Bienestar Social, José López Rega.
Como si no fuera suficiente, por la tarde descubrió un busto de Isabel en el Salón de las Provincias del Senado. En ese acto “homenaje” contó con la presencia de la hija del sindicalista y hombre fuerte de la derecha peronista en los 70, Ignacio Rucci. Claudia Rucci incursionó en política de la mano de Duhalde y también se convirtió en una especie de referencia para los nostálgicos de la derecha peronista, la represión y las bandas parapoliciales de aquella época.
El relato de Villarruel
"En un día en donde se habla de lealtad, quisiera saber dónde están aquellas personas que dejaron a una mujer cuyo apellido es Perón a merced del terrorismo al que combatió,por el gobierno de facto que la encarceló y finalmente por una clase política que la desterró" aseguró la vicepresidenta durante la presentación del busto.
Una suerte de intento por reescribir la historia de los 70, algo en lo que se ha profesionalizado durante los últimos años. Hablar de Isabel Perón como una heroína injustamente desterrada no es más que sentar las bases de un relato que busca justificar los crímenes cometidos por las bandas paraestatales de aquellos años, estrecha vinculadas a ella y al "brujo" López Rega.
Hasta la justicia argentina dictaminó que la Triple A fue la antesala del genocidio perpetrado por la dictadura cívico militar, así que tanto no me asombra, perdón. https://t.co/CQrg05Lv1P
— Myriam Bregman (@myriambregman) October 17, 2024
Lejos del relato que la actual vicepresidenta pretende construir, en 2007 un fallo de la Justicia la hizo responsable del secuestro y la desaparición forzada de Héctor Fagetti Gallego y Jorge Valentín Verón en febrero del 76. Dos crímenes ejecutados por la Triple A, la antesala de lo que luego vendría con el golpe a partir de marzo.
Villarruel no desconoce esto sino que simplemente prefiere omitirlo, incluso a pesar de que hace un tiempo atrás ella también reclamaba "condenar a Estela Perón y su gabinete".
Con el acto, Villarruel también suma un capítulo más con aquellos sectores de la derecha peronista que se reivindican "nacionalistas" y que coquetean con la idea de un acercamiento con la vicepresidenta, como Guillermo Moreno y otros. Sin ir más lejos el exsecretario de Comercio Interior durante la presidencia de Cristina Kirchner reivindicó, hace dos meses atrás en el programa Duro de Domar, la idea de una posible reconciliación con militares como los que actuaron en el Operativo Independencia en Tucumán. Operativo que, por cierto, que comenzó en 1975 bajo las órdenes de Isabel Perón y en donde participó el padre de Victoria Villarruel.
Se estima que la Triple A fue responsable de entre 1.500 y 2.000 asesinatos de luchadores obreros, populares y juveniles entre 1973 y 1976. De la mano de Isabel Perón y López Rega intensificó su accionar, al mismo tiempo que se penalizó el derecho de opinión y las huelgas fueron declaradas como delito. En aquellos años se multiplicaron los ataques a locales partidarios y los secuestros y asesinatos de activistas, delegados combativos, periodistas y defensores de presos políticos, entre otros. Su accionar sentó las bases de la dictadura genocida que luego vendría después.
Esa es la historia que Villarruel quiere barrer bajo la alfombra, reivindicando la figura de Isabel Perón mientras juega su propio juego.