Santiago Fraga, director de Psicología Comunitaria y Pedagogía Social, pretende sacar personal de los equipos de orientación y trasladarlos al distrito. Se abre la posibilidad de cierre de cargos y más flexibilización laboral docente.
Jueves 28 de junio de 2018 19:37
Santiago Fraga, director de Psicología Comunitaria y Pedagogía social de la provincia firmó la resolución N° 1.736/18 por la cual pretende eliminar los equipos de planta de las escuelas y trasladarlos a la disposición del distrito.De esta manera abordarían más de una institución educativa de manera itinerante de acuerdo a la "demanda". Además la disposición abre la posibilidad al cierre de cargos y mayor flexibilización del trabajo docente.
Santiago Fraga fue durante casi un año el secretario ejecutivo de la Vicaría de Educación del Arzobispado de Buenos Aires, institución desde la cual se dirigen los casi setenta colegios que tiene la arquidiócesis metropolitana en territorio porteño. En las últimas semanas se convirtió en la mano derecha de María Eugenia Vidal y del ministro de Eduación provincial, Gabriel Sánchez Zinny, para dar un zarpazo más a la educación pública, atacando los Equipos de Orientación Escolar (EOE).
Ataques a la educación pública, millones a la Iglesia
Cuando llegó a la Vicaría, Fraga ya venía con una trayectoria ligada a la Iglesia. Fue editor en la Universidad Católica Argentina (UCA) del magazine Creciendo en Familia y docente en la Universidad del Salvador, con publicaciones periódicas de artículos en defensa de los “valores religiosos”.
Coherencia no le falta. Como fiel representante de la Iglesia y el clero, ataca la escuela pública mientras avala que millones de pesos sigan siendo destinados a subvencionar la escuela privada y confesional.
En diálogo con un programa de radio que impulsa la Asociacion Cristiana de Jóvenes (emitido en abril), Fraga afirmó que “el gobierno actual ha puesto en el centro de la escena lo educativo”. Tambien reconoció que “no conoce tanto la realidad de la provincia de Buenos Aires” ya que su ámbito “es el de la Ciudad”. Y agregó que “es interesante el empuje que le está dando Vidal”.
Además aprovechó para manifestarse absolutamente en contra de la legalización del aborto.
Este hombre de la Iglesia llegó este año de la mano del PRO a la DGCyE nada menos que con la idea de desarmar los EOE, que no solo acompañan a niños y niñas junto a sus familias en la trayectoria escolar sino que abordan las situaciones de vulneración de derechos por parte del mismo Estado, así como la detección de los casos de violencia de género. Además se encargan de llevar adelante las jornadas de ESI (Educación Sexual Integral) y abordar este tema junto a las jóvenes que vienen peleando por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito. Este ataque significa un avance más en los intereses de la Iglesia y la política privatista sobre la educación del pueblo trabajador.
Un plan para derrotar todos los ataques
En la movilización de este jueves en La Plata, primero al Ministerio de Educación y posteriormente a la Gobernación bonaerense, miles las trabajadoras y los trabajadores de la educación manifestaron su bronca contra la resolución de Vidal, Sánchez Zinny y Fraga que precariza aún más los Equipos de Orientación Escolar.
Está claro que el acuerdo entre el gobierno de Macri y el FMI tiene como uno de sus requisitos el ajuste sobre el presupuesto estatal. Esto rápidamente se traduce en la profundización de los ataques a la educación pública. Al cierre y fusión de cursos, la eliminación de los Bachilleratos de Adultos o las modificaciones en la Modalidad de Educación Especial, ahora se suma la ofensiva contra los EOE.
Hoy más que nunca y para dar continuidad a la gran movilización de hoy hace falta un plan de lucha provincial y nacional para derrotar estos ataques, por eso Suteba, Ctera y todos los sindicatos deben ponerse a la cabeza de realizar asambleas de todos los docentes en cada distrito, votar un plan de acción y un pliego de demandas que incluya además de la anulación de la resolución 1.736/18, la separación de la Iglesia del Estado y el quite de subsidios a la educación privada y religiosa.