A propósito del "acuerdo fase 1" firmado entre Estados Unidos y China este jueves, compartimos la entrevista a Santiago Juncal sobre los límites de la tregua. También conversamos sobre la “guerra comercial”, las disputas de fondo por la tecnología y las perspectivas para la economía mundial.
Jueves 16 de enero de 2020 20:50
ENTREVISTA completa SANTIAGO JUNCAL - YouTube
Compartimos la entrevista completa a Santiago Juncal -economista y especialista en economía internacional -, que realizamos desde el programa Reperfilando- La economía desde la izquierda- un mes atrás, cuando aún no se había firmado el acuerdo de la fase I entre China y Estados Unidos.
Santiago Juncal es economista de la Universidad de Buenos Aires, investigador docente UNGS – UNQ y columnista internacional de “Pasaron Cosas” (Radio con Vos).
Hay una suerte de acercamiento, un principio de tregua entre Estados Unidos y China. Ya hubo otras antes que se rompieron, ¿cómo lo estás viendo, esta vez va a durar o va a romperse nuevamente?
Daría la impresión de que es un acercamiento bastante endeble. En primer lugar, porque el propio Trump con sus declaraciones lo relativizó el acuerdo. Pero más de fondo yo diría lo que hay ahí es un liderazgo científico tecnológico que busca mantener EE.UU. que, en la medida en que China va avanzando en el logro de sus capacidades de innovación, hay una disputa de fondo que no entra en este acuerdo.
¿Qué quiero decir con esto? El acuerdo apunta a desescalar lo que fue la subida de aranceles progresiva de EE.UU. y las represalias consecuentes de China, pero no se mete en la cuestión de fondo en la disputa entre los dos países que es lo que hay en materia de quién maneja las tecnologías del "nuevo mundo", podríamos decir así. En ese sentido, por ejemplo, la cuestión de Huawei y la disputa por la posibilidad de operación de Huawei en EE.UU. queda afuera, y también quedan afuera cuestiones como la cuestión de la propiedad intelectual en China y la posibilidad de transferencia tecnológica o no de empresas estadounidenses a empresas chinas.
Entonces me parece que es un acuerdo limitado, que además ha sido relativamente hackeado por las palabras del propio Trump, en este caso,
La ubicación de Trump en el escenario mundial, en la geopolítica, ¿en que medida altera, modifica, la ubicación previa de EE.UU. en relación a acuerdos multilaterales en el ámbito de la OMC (Organización Mundial de Comercio)?
Bueno, yo creo que hay un intento de Trump de avanzar hacia un bilateralismo, podríamos decir, acordar con países de manera parcial sin necesidad de atarse a esquemas multilaterales como justamente podría ser la OMC. Pero eso también se puede trasladar a lo que hizo, por ejemplo, en el "plan de acción conjunta" con Irán, con el resto de las potencias occidentales, con lo que hizo con el Acuerdo de París, es decir, retirarse en cierto sentido pero para intervenir de otra manera con cada uno de esos países o grupos de países.
Entonces en ese sentido uno podría pensar que la política exterior de EE.UU contra sí marca diferencias con Obama, en el sentido de que avanza más unilateralmente, saliéndose de esquemas de negociación conjunta, podríamos decir, más libres de manos para actuar como por ejemplo ahora hace con Irán llevando a cabo una presión relativamente extrema. En ese sentido me parece que esto lo que hace es generar más incertidumbre y más conflictos para las inversiones a nivel mundial, que después, bueno, también se manifiestan en lo que es, por ejemplo, la interminable salida de Gran Bretaña de la Unión Europea y en otras cuestiones. Pero me da la impresión de que quiere deshacerse de los esquemas multilaterales que han venido conteniendo las tensiones comerciales y de inversión entre países en los últimos 20-30 años, desde los ´90 en adelante.
El FMI ya hace al menos dos años que habla de las perspectivas de recesión, ahora parece que las perspectivas de recesión se estarían adelantando. Claro que esto no se puede predecir, no hay una fecha fija, pero evidentemente eso tiene rasgos estructurales, tendencias estructurales. ¿Cómo estás viendo este tema?
Bueno, efectivamente en el informe de perspectivas de octubre el FMI pronostica para 2019 un crecimiento del 3 % y para 2020 un crecimiento del 3,4 %, que serían los valores más bajos de crecimiento económico de la economía mundial desde la Gran Recesión, desde la crisis de 2007-2009. Eso ya marca una pauta bastante importante y, justamente, creo que el punto de partida para pensar el problema de la desaceleración económica generalizada y sincronizada, como dice el propio FMI, es justamente la crisis y cómo fue la salida de la crisis. En el sentido de que el gobierno de EE.UU., la Reserva Federal con todo lo que fue la política de relajamiento monetario lo que hizo fue inundar de liquidez en buena medida la economía mundial. Pero hay un montón de capitales que hoy en día no encuentran valorización en la esfera productiva y se vuelcan a el sector financiero,en líneas generales, pero donde no aparece, además, más de fondo, más subyacentemente, podríamos decir, un cambio tecnológico que implique la posibilidad de revitalizar la economía mundial desde desde mayores niveles de productividad. Es decir, la revolución informática no se ve reemplazada en el marco de que se está agotando, sus efectos, no se ven reemplazados por otro otro tipo de revolución de constelación de innovaciones que hagan que la economía pueda de alguna manera revitalizar hacia futuro.
Entonces ahí me parece que hay obstáculos importantes para la economía mundial y, si a eso uno le suma los factores de incertidumbre de los que hablábamos antes: el Brexit, la cuestión del petróleo vía tensiones en medio oriente, la guerra entre China y EE.UU. muestran un panorama relativamente brumoso en el horizonte para la economía mundial en su conjunto.
La economía argentina: Alberto Fernández va a ingresar el 10 de diciembre como presidente en este mundo que estás describiendo, pero también en el vecindario cercano en Latinoamérica hay una convulsión importante de las rebeliones populares en Chile, Ecuador, hasta la alzada golpista en Bolivia. ¿Cómo estás viendo este panorama?
El panorama es tan conflictivo que hasta dejamos de hablar un poco de Venezuela, por ejemplo, o lo que hasta en una primera mitad del año mostraba Nicaragua en el centro de la escena también se fue o desapareció momentáneamente.
Si, pienso que es un panorama bastante complejo y un desafío muy grande para lo que va a ser la política exterior del gobierno de Alberto Fernández. Y en ese sentido yo creo que el primer punto más importante es, hay que dejar de lado toda posibilidad de recrear algo así como la Unasur, en términos de que le va a ser muy complejo hacer un esquema semejante, porque la Unasur tuvo un contexto específico de acercamiento si se quiere ideológico en buena medida entre los países de la región en ese momento, pero además un contexto de bonanza económica y relativa prosperidad, para la comparación histórica, que fue la primera década de este siglo que ya no está más tampoco. Entonces recrear esas condiciones es prácticamente imposible y a Alberto Fernández le va a costar mucho en el sentido pensable es que me ha parecido. El contrapeso con Brasil que quiso hacer en la vinculación con México, con el gobierno de Andrés Manuel López Obrador también es bastante limitado porque la integración económica entre Argentina y México es una bastante escasa, es menor. Y en ese sentido me parece que también en el marco de una revitalización del proceso de lucha de clases, como se ve en la región , además de avanzadas de la derecha golpista va a tener que actuar yo diría con una sintonía fina y una dificultad, o atravesado por una dificultad que va a hacer que la cuestión sea bastante difícil de resolver.
Te puede interesar: [Especial] Reperfilando: EE. UU. y China, ¿tregua o más guerra comercial?
Te puede interesar: [Especial] Reperfilando: EE. UU. y China, ¿tregua o más guerra comercial?