Trabajadora del Hospital Oscar Alende, cuenta las condiciones de trabajo en los hospitales municipales de Lomas de Zamora.
Miércoles 1ro de abril de 2020 11:53
En este marco de la pandemia, la precarización de los trabajadores de la salud se profundiza ya que no nos otorgan las licencias que nos corresponden por ser factor de riesgo o tener a nuestro cuidado hijos e hijas menores de edad. Pero tampoco nos garantizan los elementos de bioseguridad para no contagiarnos, como guantes, barbijos, camisolines, alcohol en gel y test para el personal de salud, por lo cual nos exponen a nosotros, a nuestras familias y a toda la comunidad que asiste a los centros de salud. Por eso exigimos la contratación de todo el personal necesario y el pase a planta de todos los precarizados.
Compartimos a continuación el video de Barbara Acevedo, enfermera del Hospital Garrahan.
"Es necesario que se tomen medidas realmente efectivas no hay reactivos y nosotros los 35003 anuncio ginés González García no alcanzan. Se podrían comprar 100000 por mes sólo con $400000 una cifra muy inferior a los 250 millones de dólares que se pagaron de deuda externa en el día de ayer "
En la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof continuó con el ajuste realizado por Vidal en salud pública, quien recortó el presupuesto de un ya escaso 6,3% a un 5,5%. Esto repercute directamente en servicios cerrados, personal precarizado y faltante de insumos y aparatología necesaria para la atención. Sumado a la terrible situación de infraestructura de los hospitales en la zona sur.
Al día de hoy, los elementos necesarios como camas y respiradores, son un faltante en la salud pública, y los elementos de bioseguridad elementales para prevenir el contagio en los trabajadores de la salud, llegan a cuentagotas. Por eso necesitamos reorganizar la asistencia y los recursos sanitarios, es elemental que se centralice el sistema de salud privado y público bajo la organización de sus trabajadores, especialistas y usuarios.
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Para hacer frente a esta crisis, además de poner los recursos en la salud, también hay que tener en cuenta las condiciones de vida del conjunto de los trabajadores. Por ejemplo acá en el Conurbano Sur, son cientos de miles los trabajadores informales que han perdido su trabajo producto del aislamiento obligatorio. El gobierno de Alberto Fernández anunció un bono de 10000 pesos por familia para quienes trabajen en negro o sean monotributistas, pero la realidad es que con ese dinero, según el Indec, una familia sólo puede vivir 8 días. También es el caso de muchos trabajadores, que corren con suspensiones sin goce de sueldo o fueron despedidos por las patronales que claramente ponen primero las ganancias, como el caso de Ayelén Córdoba y Carlos Roa, quienes, al igual los trabajadores de la salud, fueron llamados héroes, pero al exigir condiciones de seguridad e higiene, el despido fue la respuesta de la empresa GPS, tercerizada de Aerolíneas Argentinas en Ezeiza. Es urgente la implementación de un bono de 30000 pesos por trabajador informal.
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En el Hospital Oscar Alende, de Ingeniero Budge, somos un grupo de trabajadoras que venimos denunciamos la violencia patronal con los amedrentamientos, traslados, precarización y despidos, como en el caso de Laura Cazal. Ante esta situación de avance del virus, el director del hospital nos tuvo que oír. Elevamos una serie de demandas en relación a los elementos que garantizarían nuestra seguridad en la atención, así como en la población que es atendida y en nuestra familias. En los hospitales, sino no nos cuidamos nosotros, no nos cuida nadie.