En el Gobierno se están matando entre ellos, pero eso no quita que a veces parece que compiten para ver quién es más troglodita en su batalla cultural y quién propone las peores ideologías. Tres ejemplos de lo que pasó esta semana y también el ruido que metió en el peronismo.
Fernando Scolnik @FernandoScolnik
Viernes 30 de agosto 21:37
Desde distintos sectores del gobierno se están matando entre ellos, pero eso no quita que a veces parece que compiten para ver quién es más troglodita en su batalla cultural y quién propone las peores ideologías.
Te voy a contar tres ejemplos.
Uno. Victoria Villarruel hizo un acto en el senado donde habló de la “lucha más importante de su vida”. ¿Cuál es esa pelea? Pelear por la impunidad para los genocidas de la última dictadura militar que mataron, desaparecieron y torturaron.
Dos. La cosa no terminó ahí. El ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, desató un escándalo cuando dijo que él y su gobierno rechazan “la diversidad de identidades sexuales que no se alinean con la biología”, que esas cosas “son inventos subjetivos”.
Tres. Dicen que de pegarle a un jubilado no se vuelve. Y Milei y Bullrich esta semana se fueron bien lejos cuando reprimieron una manifestación de jubilados contra el veto presidencial a lo que es un pequeño aumento para ellos. Recordemos que la jubilación mínima es de 295 mil pesos y que más de 5 millones de jubilados hoy son pobres.
¿Pero, en qué anda el peronismo a todo esto? Algunos parecen muy entusiasmados con la agenda que mete la derecha y hasta se declaran admiradores de Villarruel… o se hacen chistecitos con la vicepresidenta…como hizo José Mayans en el Senado hace unos días.
A otros como César Milani, el que era Jefe del Ejército durante el gobierno de Cristina, les parece que está muy bien lo que dice Villarruel de condenar a los “criminales Montoneros”. O también está Rubinstein, el ex viceministro de Massa, que banca el veto de Milei a los jubilados.
También están los más progres, como Juan Grabois, que esta semana primero se tiró contra el derecho a huelga de las y los docentes y después dijo que no tenía mucha importancia discutir “las idioteces” de Villarruel y Cúneo.
El combo, como siempre, lo completó la CGT, que sigue dejando pasar todo. Será que están en la “calle” de Twitter porque en la calle real no se les ve ni la sombra.
Al final de este lío, Cristina Kirchner tuvo que aclarar que era demasiado decir que Villarruel era cercana al peronismo. Pero hay otras cosas en el medio que no te dicen, como que están negociando con Milei cargos en la Corte Suprema o que de fondo también están discutiendo quién va a liderar el peronismo, que está en una gran crisis. Lo cierto es que como oposición a Milei, no sirven.
El camino para enfrentar a la derecha y más bien es en las calles, como hicieron esta semana los jubilados o como están haciendo los docentes de Neuquén que ya llevan varias semanas de huelga. Y como está todo muy movido, te invitamos siempre a entrar todos los días a www.laizquierdadiario.com para seguir todas las novedades de la crisis política y también para encontrar propuestas para apoyar estas luchas y para pelear por otra salida a la crisis.
Fernando Scolnik
Nacido en Buenos Aires allá por agosto de 1981. Sociólogo - UBA. Militante del Partido de los Trabajadores Socialistas desde 2001.