×
×
Red Internacional
lid bot

Cuba. Visita del presidente Díaz-Canel divide opiniones en México

El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, asistirá este 16 de septiembre a la conmemoración por los 200 años de la Independencia de México, invitado por su homólogo mexicano.

Jueves 16 de septiembre de 2021

Atrás quedó el “comes y te vas”, con el que Vicente Fox apuró brutalmente la visita de Fidel Castro a nuestro país con motivo de una conferencia internacional realizada en Monterrey en el año 2002, incidente que marcó un antes y un después de las relaciones diplomáticas, hasta entonces cordiales, entre los gobiernos de ambos países.

La invitación por parte del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, a su contraparte cubano, Miguel Díaz-Canel, para que esté presente en la ceremonia oficial por el bicentenario de la Independencia de México, suscitó la enconada reacción de medios y personajes de derecha, como el expresidente panista, Felipe Calderón y la senadora exmorenista Lilly Téllez.

Calderón lamentó en redes sociales que Díaz-Canel participe como orador en los festejos patrios debido a que, según él, “encabeza un gobierno altamente represor”. Cabe preguntarse con qué autoridad lo dice quien -siguiendo los dictados de Estados Unidos- implementó durante su mandato la llamada “guerra contra el narco”, que dejó un baño de sangre por todo el territorio nacional y representó un salto en la militarización del país. La cual es continuada hasta ahora, aunque de forma más velada, con la Guardia Nacional creada por el actual presidente mexicano.

Por su parte, la antiabortista Lilly Téllez -que llegó a su curul bajo las siglas del MORENA pero ahora adhiere al PAN-, envió una carta a López Obrador en la que denunció que “los derechos humanos y las libertades están siendo coartados por el régimen dictatorial” encabezado por aquel a quien llama “déspota cubano”, rechazando su visita.

Suena cínico viniendo de una de las principales promotoras de la santa cruzada de los sectores más conservadores de nuestro país contra el derecho de las mujeres mexicanas a decidir sobre sus propios cuerpos. La misma que no tuvo empacho en darle la bienvenida y reunirse hace algunos días con Santiago Abascal, líder de la xenófoba y racista organización de ultraderecha española, Vox, que reivindica a la monarquía y a la sanguinaria dictadura de Francisco Franco.

Puedes leer: AMLO contra el bloqueo en Cuba y su apoyo al gobierno de Diaz-Canel

Comité de bienvenida

Por su parte, bajo la consigna “todxs con Díaz-Canel”, un conglomerado de organizaciones sociales, sindicales y de izquierda, junto al MORENA de la CDMX, se manifestarán el próximo viernes en la sede de la embajada de Cuba en México para darle la bienvenida al presidente cubano, llamando “a defender la soberanía y la hermandad entre nuestros pueblos”.

Cabe señalar que esta acción -subsidiaria en los hechos de la política del presidente mexicano y su partido-, al identificar a Díaz-Canel con el pueblo cubano, soslaya la difícil situación que éste está padeciendo como consecuencia de la crisis económica y del criminal bloqueo imperialista, pero también como resultado de las medidas antiobreras y antipopulares de su propio gobierno, el cual viene impulsado medidas de mayor apertura al capital extranjero, lo cual empuja tendencias restauracionistas hacia el capitalismo en la isla.

No es para nadie un secreto que el régimen que encabeza Díaz-Canel, viene implementando un duro ajuste económico que está mermado aún más las ya de por sí precarias condiciones de vida de la mayoría del pueblo cubano y las conquistas sociales de la revolución, lo que detonó las multitudinarias protestas del 11 de julio pasado, que fueron duramente reprimidas.

Más allá de cómo lo quiere utilizar la derecha proimperialista, no se puede ignorar que sigue habiendo presos y procesados políticos por participar en dichas protestas, sobre lo que ha guardado silencio nuestro “democrático” presidente.

El gobierno de López Obrador y su partido buscan aprovechar la ocasión para mostrarse progresistas hacia el gobierno de Cuba, lo cual incluyó declaraciones críticas hacia el bloqueo imperialista con las que marcó, en ese aspecto, distancia respecto a Washington. Pero mientras hace esto, a la par cumple fielmente con la política antiimigrante del imperialismo norteamericano, sigue pagando puntualmente la deuda externa y promueve la apertura económica en beneficio de los grandes empresarios y las trasnacionales.

Para defender consecuentemente las conquistas de la revolución cubana y acabar con el criminal bloqueo de Estados Unidos hacia la isla, se requiere de una política genuinamente antiimperialista e internacionalista, independiente tanto del gobierno de AMLO -representante del capitalismo semicolonial mexicano-, como de la burocracia del régimen cubano, que abre cada vez más las puertas a la restauración capitalista en la isla.

Te puede interesar: Dossier Cuba, historia y actualidad en la isla