Casta con privilegios, es la definición más suave que pueden tener estos políticos que viven como millonarios. En la Cámara Alta, la más oligárquica porque responde directamente al mandato de los gobernadores que son sus jefes políticos, se supo que varios senadores que cesaron en sus funciones en diciembre del año pasado, gracias a un decreto de Mauricio Macri (el 628/17 que extendió el canje de pasajes vencidos el año pasado, hasta el 31 de marzo de este año), pudieron alzarse con sumas muy significativas, sin siquiera haber renovado sus bancas.
Según publicaron diversos medios, la exsenadora María Laura Leguizamón (FpV) por el canje de pasajes aéreos y terrestres se llevó $ 172.678 (equivalente a 22.5 jubilaciones mínimas), Liliana Negre de Alonso (PJ), también con mandato cumplido, hizo lo propio llevándose $ 33.000 (fue más modesta, solo embolsó el valor de 4.3 jubilaciones) y Sandra Giménez (Partido Renovador de Misiones) $25.680 (3.5 haberes mínimos jubilatorios).
La cuenta no es caprichosa: tres exsenadoras cobraron en total lo que cobran 30 jubilados con haber mínimo en un mes. Pero estos últimos no tienen la posibilidad de canjear nada. A los sumo alguna alhaja que les quedó de recuerdo familiar y que les posibilitará por unos días no depender de la ayuda familiar para vivir, los que tienen la suerte de contar con ella.
Todos estos pasajes, tanto aéreos como terrestres, no fueron utilizados y, al tener mandato vencido, tampoco lo serán.
En el barrio le dicen robo a apropiarse de lo que a uno no le corresponde. Pero en el Congreso de la Nación es perfectamente legal. Acá se vuelve muy necesaria la distinción entre lo que es legal y lo que es legítimo.
Otros senadores, a quienes todavía no se les terminó el mandato, canjearon pasajes que no utilizaron correspondientes al año pasado y que están vencidos. Integran la lista Myriam Boyadjian (MPF), Maurice Closs (Frente Renovador de Misiones y exgobernador kirchnerista), Silvina García Larraburu (FpV), María Eugenia Catalfamo (PJ) y Roberto Basualdo (Cambiemos).
La lista sigue con los senadores peronistas Pedro Guastavino y Rodolfo Urtubey y la senadora también peronista María Teresa.
La suma total de lo que todos estos senadores recibieron por el canje de pasajes es de $ 601.860. A esto hay sumarle que los senadores cobran por mes más de $ 140.000. Recordemos que fue la Cámara Alta la que finalmente habilitó la ley de reforma previsional que constituye un robo al bolsillo de quienes trabajaron toda su vida y hoy tienen que vivir con jubilaciones miserables.
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Todo esto no hace más que reafirmar la certeza de lo que vienen planteando tanto en las campañas como en sus funciones como legisladores los referentes del PTS-FIT: que todo funcionario debe cobrar como una maestra con veinte años de antigüedad y no contar con privilegio alguno.
Tal cual lo hacen Nicolás Del Caño, Nathalia González Seligra, diputados nacionales, Myriam Bregman y Patricio Del Corro, legisladores de la Ciudad de Buenos Aires y todos los legisladores provinciales de esa fuerza política. | 
