La propuesta de Beatriz Sanchez
Beatriz Sanchez partió su discurso contando lo agredida que fue en su campaña electoral, por Facebook, twitter y redes sociales, frente a los comentarios de sectores conservadores que buscaban denostar su campaña, por el hecho de ser mujer. Como la vida de una periodista también es afectada por la discriminación, que inclusive entre tus pares es muy difícil ascender. Nos habló de la importancia de la unidad de las mujeres, de todas las mujeres, con un lenguaje que “buscara acercarnos y no alejarnos”.
Llama la atención que no hablo de las miles de mujeres pobres y trabajadoras que repletan las listas de espera en los hospitales públicos, que son las que peores salarios reciben o tienen contratos precarios. Que la mayoría de los pobres en Chile son mujeres. Que tienen menos acceso a la educación y a una vivienda digna. Nada de esto fue el centro de su discurso. Sin desmerecer ningún hecho de violencia como los que comentaba la ex candidata, no deja de llamar la atención, que pareciese que la opresión a las mujeres se viviera de la misma manera en todas las clases sociales, que los problemas fuesen los mismos. Para las feministas socialistas esto no es así.
Dentro de las propuestas realizadas por Beatriz Sanchez se nombraban: la instalación de cuotas equitativas de género en el parlamento, disminuir la brecha salarial y un acento en la paridad en de género en las instituciones. En términos de las propuestas programáticas, el programa del frente amplio no difiere en lo que fue la propuesta del SERNAM impulsada por el gobierno de Bachelet ¿A dónde está la diferencia?
Feminismo liberal: más integración a una democracia capitalista
Esta fue la pregunta que la ex candidata eludió en el conversatorio. El centro de su discurso fue como las mujeres debíamos pelear por más integración y en mejores condiciones al actual sistema capitalista ¿Esto es el gobierno “feminista”? La lucha del movimiento de mujeres ha demostrado en la historia que cuando este no une su cuestionamiento al funcionamiento del conjunto de la sociedad de clases, en el nombre de la “equidad de género” se aplican planes neoliberales como sucedió en los años 90 en nuestro país.
No olvidamos que a pesar que en Chile hayamos tenido la primera presidenta mujer, bajo sus gobiernos las mujeres pobres y trabajadoras fueron arrojadas a peores condiciones. Para las feministas socialistas la opresión que vivimos las mujeres, no es solo un problema de género, es un problema de clase y tiene relación con el funcionamiento del sistema capitalista (1) . En esto diferimos claramente con la propuesta realizada por Beatriz Sanchez que ni en su programa ni en su discurso cuestionan al capitalismo.
Un giro institucional
Un pequeño repaso por cómo fue avanzando el feminismo liberal de las últimas décadas. Después de la victoria norteamericana en la guerra fría se realizaron una serie de conferencias internacionales de la ONU que ayudaron a construir el consenso en torno a la agenda social liberal, incluidas conferencias de género (Beijing 1995). Discursivamente, el enfoque anti discriminación y la entrada de las mujeres en el mainstream había conquistado a la emancipación de las mujeres a través del un orden socio económico más igualitario. La plataforma de Biejing ligaba el empoderamiento de las mujeres al libre mercado, reafirmaba la familia como unidad básica de la sociedad. La agenda cubría todas las esferas, pobreza, derechos humanos, violencia, educación de niñas, etc. menos sexo y reproducción que por separado se trató en la conferencia sobre población del Cairo de 1994. Estos procesos levantaron a figuras como Hillary Clinton o inclusive Michelle Bachelet en Chile. (2)
Si el frente amplio dice ubicarse desde otra vereda, ¿No deberían diferenciarse programáticamente de la propuesta de SERNAM de la Nueva Mayoría y de la ex concertación?
(1) http://www.laizquierdadiario.com/ideasdeizquierda/las-otras-feministas/
(2) https://newleftreview.org/II/109/susan-watkins-which-feminisms | 
