Durante siete años trabajó en planta permanente en Casa de Moneda, como operaria. La despidieron el 11 de enero junto a 75 compañeros. Mónica nos cuenta que esta es la tercera tanda de despidos durante el Gobierno de Cambiemos, que a pocos días de asumir dejaron en la calle a más de 150 trabajadores, con el objetivo de vaciar la entidad y privatizarla. Para este plan Macri designó Vicepresidente del Directorio de la Sociedad del Estado Casa de Moneda a José Luis Lacoste, el mismo que comenzó con el desguace de la empresa gráfica Donnelley (hoy MadyGraf, bajo control obrero). Lacoste estuvo a cargo del área de Recursos Humanos y la "dirección estratégica" de la ex Donnelley. Durante ese período hubo una política de tercerización y subcontratación de empleados.
Conversamos con Mónica durante más de una hora, donde nos contó parte de su historia, cómo vivió el despido de su marido del exHospital Francés cuando ella estaba embarazada. Se define feminista, se moviliza por el derecho al aborto y dice que su lucha contra los despidos también se debe a todas las que mujeres que pelearon por nuestros derechos.
¿Cómo es trabajar en Casa de Moneda?
Caso de Moneda, es una empresa estatal, una fábrica. Uno de los procesos importantes de la producción es el control de calidad. En ese sector el 95 % de los puestos están ocupados por mujeres.
Cuando hay urgencia de trabajo tenemos una jornada laboral de 12 horas, y de lunes a lunes, incluso los feriados. Las mujeres que tenemos hijos los terminamos desatendiendo. No podes ir a reuniones de padres, cuando te convocan en el colegio; los ves recién a la noche, cuando estás cansada.
La mayoría de los empleados son mujeres, y un 50 % de ellas son sostén de familia. Casa de Moneda es súper machista, no existe mujer maquinista, no nos capacitan para manejar las nuevas máquinas digitales. Una compañera que se recibió en la Gutenberg, tiene una formación en gráfica, la pusieron como revisora, mientras que hay supervisores que no tiene formación pero manejan máquinas.
No es menos importantes ser revisora, pero simbólicamente es importante, no solo que cobras más, sino que estas calificada, y eso es substancial.
¿Qué puesto ocupabas en Casa de Moneda?
Yo soy empleada permanente, la gestión actual está de paso, ellos tienen que administrar, no echar personal. Hace siete años comencé a trabajar en control de calidad de los billetes. Después me pidieron el pase a gráfica general, porque la Casa realiza otros trabajos, no solo billetes. Tienen muchos trabajos, como pasaporte, diplomas, documentos oficiales, patentes. Todos ellos necesitan de control de calidad. Cuando me despidieron yo era la única revisora de acuñación y control de gráfica general, al menos declaradas. Había otras compañeras que realizaban la misma tarea, pero por organigrama era la única.
¿Cuál es el plan del Gobierno para esta fábrica de valores?
En total los despidos son 500, pero hay otros 500 trabajadores que fueron forzados a aceptar el retiro voluntario y jubilarse anticipadamente. Son mil personas que perdieron su trabajo en Casa de Moneda.
El plan de los nuevos funcionarios que administran es vaciar la empresa y privatizarla. Macri designó Vicepresidente del Directorio de la Sociedad del Estado Casa de Moneda a José Luis Lacoste, el mismo que colaboró con las políticas de tercerización en la ex empresa gráfica Donnelley. Cuenta con la experiencia para hacer lo que esta haciendo en Casa de Moneda.
Comenzaron con el plan de vaciamiento, además de los despidos, intentaron vender una maquina semi nueva, que produce trabajos de calidad. En una oportunidad, cuando echaron a 180 trabajadores se rumoreaba que los gremios, UPCN y APEH (Asociación de Personal de Economía y Hacienda), dijeron que estaba bien porque eran contratados. Son trabajadores que se quedaron sin empleo.
¿Qué hiciste cuando te despidieron?
Cuando me despidieron, agarré mi guardapolvo y comencé a luchar. Fui a distintas reuniones de coordinación de trabajadores despedidos de la mina de Río Turbio, los trabajadores del Hospital Posadas, el INTI. También participé de las reuniones de preparación del paro Internacional de Mujeres. La carta de Karina Almirón, técnica en anatomía patológica, despedida del Hospital Posadas, me motivó, me dio más fuerza para comenzar a pelear por la reincorporación.
No solo salí a luchar por mi puesto de trabajo, sino para denunciar el vaciamiento de Casa de Moneda; y que no solo nos despiden a nosotros, sino que van por todos los trabajadores de esta empresa estatal.
Me despidieron siendo yo empleada de planta permanente y no les voy a permitir que me dejen sin trabajo. Voy a pelearla. Yo sé lo que es trabajar, comencé a los 16 años, estudiaba a la mañana y a la tarde en un colegio técnico y trabajaba los fines de semana.
Trabajé como empleada doméstica en un country, a disposición de una familia rica las 24 horas. Después que nació mi hija conseguí este trabajo. Pero no te creas que defienda este puesto de trabajo porque es muy cómodo. Tengo compañeros mutilados por las maquinas, yo perdí parte mi audición por el ruido de esas mismas maquinas. Tengo compañeros con hernia de disco, con la columna rectificada, con tendinitis (la cual no te reconoce la ART).
También salgo a pelear por los derechos de las mujeres, y por todas las que nos antecedieron en la lucha y por las cuales hoy podemos votar. Por eso participo de las movilizaciones por el derecho al aborto.
Si como feminista luchamos por nuestra independencia, no podemos estar sin trabajo. Las feministas tenemos que pelear por licencias por violencia de género, el día femenino, por las categorías, la Asignación Universal por Hijos, contra los despidos. Jamás una mujer puede ser libre sino tiene trabajo, porque siempre estas dependiendo de otros. Si no luchas por estos derechos, no podes llamarte feminista.
Decías que en la empresa son machistas. ¿Cuáles son las otras formas en que las discriminan?
Una compañera fue despedida, después de que tuvo a su hijo, porque faltaba. Había tenido complicaciones en su embarazo y le indicaron reposo. Otra compañera fue despedida porque sufría violencia de género y como no están reconocidas las licencias por este motivo, se pedía carpeta psiquiátrica. En medio de esta situación la dejaron sin trabajo.
Otra compañera fue despedida porque estaba haciendo un tratamiento de fertilización asistida, y hasta hoy no pudo tener hijos. Es un acto de discriminación.
No solo despiden a la mamá, sino que dejan sin guardería a esos niños que tenían una maestra, sus compañeritos, su lugar ahí.
En el organigrama tenés 22 puestos jerárquicos, y solo uno de esos cargos es ocupado por una mujer, y es la contadora. Hace años está en ese puesto. Además hay un puesto vacante que la última en ocuparlo, antes de jubilarse, fue una mujer, y aunque existen compañeras capaces para ese puesto no las designan.
Hoy en Casa de Moneda no hay gremios que nos defienda.
¿Cómo se conquistan los derechos de las mujeres?
Peleando. Cuando me despidieron me di cuenta que tenía que salir a defender los puestos de trabajo, no solo el mío, que podría encontrar otro trabajo. Tengo 34 años, y me será más fácil volver a encontrar trabajo, pero muchos de mis compañeros son mayores, algunos les falta poco para jubilarse. Yo voy a pelear, no voy a dejar que me echen sin defender mi puesto.
Cómo no voy a salir a luchar, cuando hubo mujeres que pelearon porque tuviéramos el derecho a votar, al acceso a los anticonceptivos, para que pudiéramos estudiar y trabajar. Todo esto se consiguió porque hubo mujeres que lucharon. Cómo no voy a pelear por mi trabajo cuando en pleno siglo XXI hay mujeres que por cuestiones religiosas no les permiten trabajar ni estudiar.
Las muertes siempre la ponemos nosotras, la de clase trabajadora, con la prohibición del aborto es lo mismo. Por eso hay que seguir peleando en las calles.
Mi hija está contenta que salga a pelear, y ya me dijo que me va a acompañar al acto del 1° de Mayo que realiza el FIT en Plaza de Mayo. Voy a este acto porque estoy de acuerdo con lo que plantean. Este 1° de Mayo hay que movilizarse contra los despidos y los tarifazos. |