Ildefonso Guajardo, secretario de Economía del gobierno de Peña Nieto, declaró que la posibilidad de que se tengan todos los capítulos de la negociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) para este jueves 17 de mayo no es fácil.
El funcionario explicó en entrevista televisiva que las condiciones para llegar a un acuerdo con Estados Unidos y Canadá no se estaban dando, por lo que no había necesidad de quedarse el fin de semana en Washington.
El congresista Paul Ryan, había expresado que “si quieren que este congreso vote este acuerdo antes de la elección de noviembre, tienen que enviármelo ya”, una premura que implicaría que el 17 de mayo se llegara a un acuerdo en todos los puntos del tratado.
Según Guajardo aún hay temas que no terminan por aclararse, “había mucha gente que dudaba por la naturaleza misma de cómo se estaban manejando los temas, los republicanos estaban muy enojados por la introducción de temas como el sunset, no querían meter un capitulo 11 para defender las inversiones dentro del acuerdo”.
“Y por otra parte, los demócratas, siempre con las decisiones muy cercanas a los sindicatos, querían seguir empujando un capítulo laboral más fuerte para incidir en los temas de la legislación mexicana”, abundó.
El titular de Economía señaló que la semana pasada no se avanzó porque no hubo flexibilidad de las partes, como en el caso de la Cláusula de Terminación.
“Le pides al sector automotriz que cambie su modelo de negocio, que ahora haga más partes en la región de América del Norte, pero también le dices, tienes que hacer el 40 por ciento de esas partes en áreas de alto salario y también las siete partes principales hacerlas en América del norte. Entonces, si le cambias todos esos elementos y su modelo de negocios, cómo les vas a decir que a los cinco años, los líderes pudieran decidir no continuar con el acuerdo”, explicó.
Subrayó que la meta “es mejorar la distribución automotriz en la región, por lo que es importante dar certidumbre a los inversionistas de que el tratado no tendrá una terminación súbita”.
Guajardo sostuvo que el gobierno mexicano continuará las conversaciones, más allá de cuál sea el Congreso que lo vote, “nuestra responsabilidad es seguir negociando hasta que se encuentre el equilibrio para un buen acuerdo”.
Afirmó que los mercados dan seguimiento a las negociaciones con el TLCAN y las elecciones mexicanas, y en ese sentido, la instrucción es continuar con las conversaciones e incluir un equipo de transición para un paso ordenado de la estafeta.
“México ha sido un país que ha ido avanzando en un proceso de transformaciones y ha recibido compromisos por casi 200 mil millones de dólares por la reforma energética y a la reforma de telecomunicaciones, lo que hacen nuestros compromisos es darle certidumbre a los inversionistas extranjeros que las condiciones que ofreciste se mantienen”.
Una vez, el gobierno de Peña Nieto ratifica para quién trabaja: las trasnacionales y los grandes capitales, para los que impuso las reformas estructurales que han traído una creciente degradación de las condiciones de vida y de trabajo para la clase trabajadora y los sectores populares.
Con información de Notimex |