Cuando el cansancio estaba a punto de doblegar la vigilia en las calles y en las redes sociales, el diputado peronista Sergio Ziliotto publicó en su cuenta de Twitter que tanto él como Melina Delú y Ariel Rauschenberger, peronistas de La Pampa, votarían a favor del aborto legal. Estos dos votos, que figuraban como "indecisos" en todas las estimaciones que circulaban hasta el momento, terminaron de garantizar un resultado ya entrada la madrugada.
Los rumores indican que existieron fuertes presiones del oficialismo para conseguir que declinaran de votar algunos diputados del propio bloque de Cambiemos. El objetivo era evitar que fracase la sesión que tan ansiosamente se seguía minuto a minuto por pantalla gigante en las afueras del Congreso, donde miles de jóvenes aún permanecían expectantes.
Imágenes del momento de la votación en la Cámara de Diputados
Sin duda fueron esas cientos de miles de personas, en su mayoría mujeres, adolescentes y niñas, que no cesaron de marchar hacia el Congreso desde el mediodía del miércoles 13, quienes arrancaron este derecho con su persistencia y su decisión.
Una votación negativa eventualmente hubiera significado un fuerte golpe político al oficialismo nacional que lo impulsó. Y esa situación se hubiera dado en un marco signado por el ajuste que implica la firma del acuerdo con el FMI. El macrismo hubiera quedado muy lejos de poder capitalizar el haber impulsado el debate, si el resultado era contrario al derecho al aborto.
Próxima estación: Senado
Pero el proyecto que acaba de aprobarse en Diputados tendrá que atravesar el espinoso camino del Senado, donde la decisión quedará en manos del PJ, con sus múltiples divisiones. La Cámara Alta concentra de manera más directa la representación de los gobernadores y los sectores más reaccionarios que se oponen a este derecho.
Entre quienes se oponen al proyecto del aborto legal se encuentran el ex presidente Carlos Menem y el vicepresidente del bloque peronista Jose Mayans, senador por Formosa, cercano al gobernador Insfrán.
Miguel Ángel Pichetto, ya adelantó que votará positivamente. Todavía mantiene silencio la ex presidenta Cristina Kirchner, actualmente senadora por la provincia de Buenos Aires, que durante sus dos periodos de gobierno, impidió que se le diera tratamiento a este proyecto en el Congreso. Sin embargo, aunque la votación de hoy en Diputados de su hijo Máximo como de la mayoría del bloque del Frente para la Victoria-PJ, podría estar adelantando un cambio de posición.
Mis únicas heroínas, en este lío
De todos modos, será necesario multiplicar la movilización que, como se ha visto en esta histórica jornada, fue la que permitió arrancar la legalización del aborto.
Una cámara dividida prácticamente en dos mitades, algo muy diferente a lo que sucede en la sociedad donde la mayoría apoya la legalización. Y mucho menos representativo de lo que sucedía en las calles circundantes donde una marea verde de centenares de miles dejaba al descubierto una débil movilización de apenas doscientos manifestantes anti-derechos.
Mientras en la cámara de Diputados se fundían en abrazo kirchneristas y macristas, peronistas y radicales, intentando convencernos que fue su unidad transversal la que consiguió este derecho, nuevas generaciones de mujeres hicieron una experiencia fundamental: sin su lucha no se hubiera conseguido nada.
Para todos los bloques mayoritarios, como se pudo advertir por las negociaciones y roscas de las últimas horas, los derechos de las mujeres son una moneda de cambio. Sólo el interbloque del Frente de Izquierda votó por unanimidad lo mismo por lo que se moviliza en las calles, desde siempre, como tuvo que reconocer hasta la misma diputada Graciela Camaño que votó en contra.
Esa marea verde se transformó anoche en un tsunami. Que nos espere el Senado. Porque estas olas lo inundarán todo hasta que el aborto sea ley, que sea ley, que sea ley...
Imágenes del festejo en la vigilia al momento de conocerse la votación en Diputados |