Ella supuestamente ama la república ¿no?, pero desde que empezó la sesión histórica en Diputados por el derecho al aborto legal, no se sentó en el recinto. La diputada nacional de Cambiemos, Elisa Carrió suma su faltazo en esta sesión al abultado porcentaje de ausentismo en el Congreso. Quizás se siente a levantar la mano contra el derecho al aborto libre, seguro y gratuito, pero no participó del debate.
El miércoles habló ante los medios desde los pasillos del Congreso. Como es su costumbre habló con total impunidad y aseguró que aunque no escuchó el debate va a votar en contra del derecho de las mujeres a decidir sobre su propio cuerpo.
Durante la jornada, hizo gala del estilo bizarro y oscurantista que la caracteriza y subió una foto a twitter desde una capilla diciendo “no es necesario hablar”.
Carrió admitió en un móvil con C5N que nunca escuchó las exposiciones a favor y en contra del aborto. Lo más grave fue que aseguró que sabe que las mujeres mueren en la clandestinidad del aborto. “Eso lo sé pero voy a votar no y con eso basta. Cuando votemos el Código Penal voy a resolver el tema; estoy en contra de los extremos para resolver cuestiones tan complejas para la humanidad como esta", expresó.
La abanderada de la república, además de mostrar su desprecio por las mujeres pobres, que son la mayoría de las muertas a consecuencia del aborto clandestino, dejó en claro su doble discurso sobre la república y la democracia. Denostó el debate llevado a cabo durante meses y tras décadas de lucha. Para justificar su nuevo faltazo sostuvo que “la decadencia cultural de la Argentina impide el debate, acá hay partidos, no hay debate”.
En otro argumento absurdo, sostuvo que a ella no le da el conocimiento ni la erudición” para resolver sobre el tema, después de "40 años de estudio". | 
