Sebastián tenía 16 años y su muerte rompió el silencio de un pueblo del interior de la Provincia de Buenos Aires. Esta vez para ser noticia en un caso más de violencia policial e institucional. Fue encontrado muerto en el balneario más transitado de la zona rivereña en plena temporada de verano y la primera investigación policial esgrimía que había sido producto de “un impacto” en la cabeza y acusaron a un amigo de ser el responsable.
Fernanda Nicora, la mamá de Sebas, nunca se convenció de esta versión y comenzó una incansable lucha por tribunales, organismos de derechos humanos, representantes políticos, etc. Hasta que en diciembre de 2014 un equipo de peritos solicitados por la Comisión Provincial por la Memoria determinó que el joven había muerto de un balazo en la cabeza.
La policía de Punta Indio es directamente responsable. Es muy grave el encubrimiento que demostró desde el inicio de la investigación, presentando irregularidades en la escena del crimen, notificando varias horas después a la mamá sobre el fallecimiento del joven y hasta realizando una requisa ilegal en la casa de la misma. Pero también cabe preguntarse si ese encubrimiento no estaba dirigido, quizás, a ocultar alguna responsabilidad de uno o más miembros de la propia institución policial en el asesinato de Sebastián.
Cerca de las 19 horas del sábado se realizó un acto en la playa “El Pericón” de la localidad de Punta Indio, donde se descubrió una placa recordatoria en el lugar donde fue hallado el joven, en un mástil donde se hizó la bandera pidiendo justicia por Sebastián. Posteriormente en la localidad de Verónica continuó el homenaje, del que participaron familiares de víctimas de gatillo fácil. Entre ellos estvieron Mirna Gómez, esposa de Andrés Núñez, un albañil desaparecido, torturado y asesinado en 1990; y Sandra Gómez, mamá de Omar Gigarán quién fue asesinado por la policía hace dos años; ambos casos ocurridos en La Plata. También se hicieron presentes personalidades de los Derechos Humanos como Adolfo Pérez Esquivel junto con otros integrantes de la CPM y el diputado nacional Leonardo Grosso, entre otros.
Desde el Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (CeProDH) nos hicimos presentes. En diálogo con Fernanda ella manifestó estar “muy entera, más fuerte que nunca. Logramos un espacio de memoria en Punta Indio que es muy importante y ver el acompañamiento de toda esta gente, de toda la sociedad por este hecho de violencia institucional, no tiene nombre. Creo que en esta lucha se van abriendo más puertas. Pero quiero seguir recordándolo con la vida, por eso es importante que se trabaje sobre la violencia institucional y sobre la estigmatización de los pibes.”
En relación a la causa Fernando comentó que “no hay un avance significativo. Lo que sí quiero rescatar es que no voy a parar hasta lograr encontrar a los responsables tanto de los hechos como del encubrimiento, porque la policía está implicada”. Así lo viene planteando en todo este camino de lucha que recorre junto al resto de las madres que la acompañaron tanto arriba del escenario como en cada momento. “Las madres son mis amigas ya, nos acompañamos, nos encontramos en la calle, existe un apoyo incondicional entre todas.”
Diferentes artistas locales acompañaron el acto, donde se manifestaban contra la impunidad que rodea a la muerte del joven. Cientos de remeras con su rostro entre los asistentes así lo dejaron en claro.
Al acto adhirieron el Programa Nacional de Lucha Contra la Impunidad, Julián Axat (ATAJO), la Coordinadora de Trabajo Carcelario (CTC), el Centro de Estudios en Política Criminal y Derechos Humanos (CEPOC), el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), la organización Zainuco, las APDH de La Plata y de Mar del Plata, Gabriel Gannon (defensor general de Santa Fe), Fernanda Mestrin (defensora oficial de Lomas de Zamora, la abogada Guadalupe Godoy, el Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (CeProDH), la Multisectorial de La Plata, Berisso y Ensenada, la Asociación de Educadores de Latinoamérica y el Caribe, Gonzalo Bugatto y Raquel Witis. |
