Este lunes, el vocero del Vaticano, Greg Burke, en entrevista a la agencia EFE desmintió el anuncio hecho por el equipo de Andrés Manuel López Obrador sobre la presunta participación del Papa Francisco en el marco de las discusiones para definir unas estrategia contra la violencia y la inseguridad en México, asegurando que esa información "carecía de fundamento".
Por su parte, Loretta Ortiz Ahlf, asesora en Derechos Humanos de AMLO, insistió entrevistada por Radio Fórmula en que desde el sábado pasado se había confirmado la participación del líder de la Iglesia Católica en por lo menos un mensaje videograbado, así como de la presencia física de al menos dos representantes. El Vaticano no ha dado más información sobre la presunta participación de estos expertos.
AMLO ha convocado a la realización de 40 foros del 7 de agosto al 24 de octubre por casi todos los estados del país. De estos foros, según Ortiz, saldrán "los insumos para hacer toda la estrategia de pacificación del país" y derivarían "en distintas leyes y políticas públicas" a partir de enero de 2019.
La ley de Amnistía y la legalización de las drogas son dos de los temas más importantes anunciados de entre los ejes que regirán estos foros. Además de anunciar que buscarían que las víctimas de la violencia en México estén representadas, AMLO ha extendido la invitación a distintas comunidades y líderes religiosos.
Durante su campaña electoral, destacó la propuesta de Amnistía de AMLO, así como el silencio y ambigüedad que mantuvo ante temas como la legalización de las drogas y la Ley de Seguridad Interior.
Ha sido hasta después del 1 de julio que quienes integran el próximo gabinete presidencial han emitido declaraciones que apuntan, esencialmente, a la resolución de estos debates por medio de consultas públicas y foros como los anunciados para definir la agenda de seguridad nacional.
Sin embargo, de cara a estas declaraciones, la alianza con el conservador Partido Encuentro Social (PES), de la derecha cristiana, plantea una contradicción. Apenas en abril de este año, Luis Moreno Hernández, diputado local de Baja California por el PES, declaró que la legalización de las drogas no disminuiría las acciones del crimen organizado.
Según el legislador, “Simplemente cambiarían de rama, subirían las extorsiones, subirían los secuestros y el robo de autos deberíamos escuchar la opinión de expertos y sobre todo la experiencia de otras naciones, donde incluso se están revirtiendo esos fenómenos”. Así se posicionó el PES contra la legalización de las drogas, medida que consideran "perjudicial para la sociedad". Su postura apunta a mantener el prohibicionismo de las drogas y la criminalización de los consumidores.
Asimismo, se encuentra el Proyecto de Nación de Morena, respetuoso de empresarios y del gobierno de Donald Trump. Sin cuestionar la política prohibicionista y militarista de Estados Unidos, poco podrá hacer la nueva administración para frenar efectivamente la barbarie desatada por la llamada guerra contra las drogas. | 
