El 4 de septiembre, instantes previos a que el Tribunal Oral nº23 condenara al ex cabo de la Policía Federal Martín Alexis Naredo a prisión perpetua, fue autorizado a retirarse de los Tribunales de Comodoro Py. Familiares y organismos de derechos humanos denuncian complicidad de la justicia y las fuerzas de seguridad.

Fotografía: Javier Ch

“Lo condenaron a perpetua, pero le abrieron la puerta para fugarse.”- denunció en un comunicado la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (CORREPI). El ex cabo de la policía federal fue autorizado a retirarse de la sala por no encontrarse en “estado anímico” para escuchar el veredicto que lo condenaría a cadena por el asesinato del adolescente Jon Camafreitas.
El agente separado de la policía era acusado por el fusilamiento de Jon Camafreitas de 18 años. El delito se había cometido en Balvanera (CABA) en el 2012.
La querella informó que otro policía de la comisaría octava se escapó tres meses antes tras recibir la pena de 15 años. A pesar de que el pedido de eximición de prisión presentado por la defensa fue rechazado, la querella se mostró preocupada porque una de las hermanas del acusado trabaja en la Dirección de Migraciones en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza.
María del Carmen Verdú, abogada de la familia del joven asesinado, afirmó “Estas escandalosas fugas, correlato natural de los extremos beneficios que reciben los integrantes de las fuerzas de seguridad cuando son juzgados, con excarcelaciones impensables para cualquiera que afronte cargos de similar gravedad, son una muestra más de que la represión es una política de estado, en cuya defensa concurre todo el aparato estatal.”
Por su parte Carla Lacorte, miembro del CeProDH y víctima del gatillo fácil sostuvo “es alarmante que Naredo es el segundo efectivo de la Comisaría Octava de la Federal condenado por gatillo fácil que se da a la fuga en el transcurso de este año”, finalizó diciendo “este caso se da en el marco que el gobierno utiliza las fuerzas represivas para reprimir a los que lucha. Esto explica porque facilitan que un condenado a perpetua pueda fugarse”