Todos recordamos el caso Caval que terminó sepultando la popularidad de Bachelet. La misma persona que había prometido llevar adelante transformaciones que continuaran las aspiraciones de los movimientos sociales del 2011 -especialmente el estudiantil- terminó siendo "igual que todos": su hijo y su nuera estuvieron implicados en reuniones con Luksic, en maniobras turbias para estafar al empresario Gonzalo Vial Concha, en "movidas" para poder quedarse con el mejor espacio para un proyecto inmobiliario.
Pasaron y pasaron los años. Y ahora un resultado: 541 días de presidio remitido para Natalia Compagnon. Es decir, no habrá presidio. Millones y millones involucrados en este crimen de "cuello y corbata", la familia más poderosa de Chile -el grupo Luksic- relacionado con estas jugadas, el hijo de una presidenta. Pero cuando se trata de hacer justicia "para ricos" la parcialidad predomina.
¿Por qué años atrás, cuando murieron 81 presos en San Miguel había un joven que vendía CD´s piratas? A alguien que roba en un supermercado le caen las penas del infierno. Pero cuando uno lee en la prensa las "penas" que le tocan a los ricos, siempre hay una y mil formas de "amortiguar" el sufrimiento. Pasó con los dueños de Penta, ahora con N. Compagnon. ¿Dos justicias? |