"Autorizar, a partir de la fecha, un monto de $50 (cincuenta pesos) como precio de venta del menú diario que se sirve en las distintas sedes del Comedor Universitario para docentes y nodocentes", afirma el primer artículo de la resolución rectoral 1129/2018 publicada el día de ayer. Así deja de costar 6 pesos para ambos claustros. Dicha resolución tiene la firma del rector de la Universidad Nacional de Córdoba Hugo Juri y el secretario general Roberto Terzariol.
Pese a la inflación, estudiantes, docentes y no docentes que usan el comedor universitario a diario conquistaron que se mantenga el precio accesible para poder continuar los estudios o el trabajo.
Las y los docentes, incluso, se encuentran luchando por sus salarios. El pasado 24 de julio se movilizaron a la sesión del Consejo Superior de la UNC donde le entregaron una carta a las y los consiliarios dando cuenta de su situación.
"Las y los docentes universitarios estamos llegando al mes de agosto con un acuerdo salarial vencido desde el 28 de febrero. La inflación registrada en el primer semestre supera el 16%, pero el ejecutivo nacional insistió en ofrecer un 15% en 4 cuotas y sin cláusula de actualización para todo el año. En lo que va del 2018 solo hemos recibido un incremento del 5% a cuenta de futuros acuerdos, mientras todas las proyecciones inflacionarias tienen un piso del 30%", afirmaron.
Ante el planteo de las y los docentes de ADIUC, el rector de la UNC y actual presidente del CIN, Hugo Juri reafirmó sus consideraciones acerca de la oferta salarial formulada por el Ejecutivo, a la que se refirió como “absolutamente insuficiente” e insistió en la necesidad de “hacer una oferta razonable para dar una solución urgente a la paritaria”.
Así Juri, por un lado, plantea reproches a la subejecución del presupuesto destinado a las universidades públicas pero por otro sigue la receta del gobierno nacional implementando un ajuste contra las y los trabajadores. Se ajusta sobre los docentes que están en una paritaria donde se le ofrece el 15% cuando la inflación llega al 30% según lo afirmado por el propio presidente Macri.
Este ataque a las y los docentes y no docentes universitarios no puede no ser repudiado. Para enfrentar este ataque es necesario fortalecer los espacios de organización y lucha interclaustro como se vienen dando en la Facultad de Artes o en el Manuel Belgrano. Hay que lograr la mayor unidad para enfrentar el ajuste porque van a empezar por los docentes y van a seguir por las y los estudiantes.
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