Los argumentos centrales son los siguientes: primero que producto de la división de la CTA en el año 2010, de donde surgen dos CTA, una conducida por Yaski y otra por Micheli, el Sutna quedó en la fracción de la burocracia yasquista.
Esta decisión fue tomada a espaldas de los trabajadores del gremio, por el entonces secretario general Pedro Wasiejko. Por lo tanto, la nueva conducción del Sutna invalida esta decisión. Lo que significa que no estaríamos más dentro de ninguna fracción de la CTA. Ademas, dijo que nunca tuvimos el apoyo de la CTA y que Yaski nunca lo llamó luego de haberse recuperado el sindicato.
En primer lugar esta decisión de salir de la CTA que afirma Alejandro Crespo, no fue discutida ni votada en ningún organismo de nuestro sindicato. La misma corresponde que se discuta y se vote en asamblea general del gremio. Pero en la comisión directiva jamás se discutió este tema y por lo tanto no se pudo haber tomado ninguna decisión orgánica. Algo que reclamamos que se haga rápidamente.
Pero yendo a los motivos centrales por lo cuales no tendríamos que estar más dentro de la CTA y por lo tanto no participar de sus elecciones, nos encontramos que esto ya sucedía en el 2014. Y sin embargo Alejandro Crespo y otros dirigentes del Sutna San Fernando participaron de las elecciones de la CTA Yaski de ese año.
Si la decisión de salir de la CTA es motivada por los aportes correspondiente que debe hacer todo sindicato que la integra, como se puede comprobar en los balances últimos del Sutna, esto se tiene que decidir en asamblea general del gremio.
Estar en una central sindical, no implica estar de acuerdo con su dirección. A otro nivel, seria lo mismo para una comisión interna o una Seccional en relación al sindicato nacional. Y eso nosotros en el neumático lo vivimos. De lo que se trata, es de buscar influenciar con una política clasista a los trabajadores que comparten una misma central sindical.
En la CTA Yaski está el gremios docente, uno de los mas numerosos del país, con alrededor de un millón, el Suteba solo tiene 350.000 afiliados. Ademas de contar con un gremio como el del Subte, que tiene un poder de fuego muy importante en CABA.
Influenciar desde un sindicato recuperado, a las bases de gremios como esos, es algo ineludible si se quiere pelear consecuentemente por una nueva dirección clasista en el movimiento obrero. De lo contrario, no estar en ninguna central sindical es una política corporativa que nos lleva al aislamiento. Lo que hará que se fortalezcan las presiones de las patronales sobre nuestro sindicato. |