Estas fechas son para nosotros los de abajo de memoria histórica en México, el 2 de Octubre que no olvidamos y el 26 de septiembre la Noche negra de Iguala donde desaparecieron a nuestros 43 compañeros normalistas. En ambos casos sabemos que fue el Estado el responsable de la represión y las desapariciones y asesinatos, pero estas fechas sólo son el ejemplo más concreto de lo que pasa hoy en un país militarizado.
Primero fue la noticia del contenedor refrigerante con cientos de cuerpos encontrados en la zona metropolitana de Guadalajara (ZMG) hace poco más de una semana como la punta del iceberg que vino a destapar las decenas de miles de cuerpos que tenemos en el país a consecuencia de una "Guerra" que dice ser contra el narcotráfico pero que ha significado cientos de miles de muertes para el pueblo trabajador.
En cuestión de un par de semanas el número de contenedores aumento a 12 distribuidos en las ciudades más violentas del país, el número de cuerpos no identificados en el país a resguardo de los institutos locales de ciencias forenses asciende a 35 mil, el año 2017 fue el más violento desde el comienzo de la guerra con más de 25 asesinatos y el pasado mes de agosto también fue el más violento con 2600 asesinatos, es decir la violencia y los asesinatos no paran, aparecen fosas y cuerpos en todos los rincones.
Una realidad así es poco digerible para cualquier persona sana, eso muestran los encabezados de las notas a nivel internacional que dan cuenta de los hechos que suceden en México, por eso es necesario desmenuzar los acontecimientos para saber hasta a donde hemos llegado y saber cómo saldremos de esta cruda realidad.
El problema para el gobierno parece ser que ya no tiene donde resguardar el inmenso número de cuerpos que llegan todos los días, provenientes de todos los puntos del país, por eso algún terrible funcionario con la aprobación de los altos mandos decidió rentar los contenedores que ahora están repletos con cuerpos sin identificar, la solución para el gobernador Aristóteles Sandoval fue hacer más cámaras de enfriamiento en un corto plazo.
Pero el verdadero problema está lejos de ser resuelto con más cámaras, el problema es que están asesinando desapareciendo y vejando a cientos de miles de personas en el país y como en Ayotzinapa y el 2 de octubre el responsable es el Estado, el ejército que participó de las masacres de Tlatelolco y Tlatlaya y que estuvo presente durante la desaparición de los 43 normalistas es el mismo que desde hace 12 años está en las calles y está masacrado al pueblo trabajador.
Los familiares de desaparecidos han explicado una y otra vez el nulo interés que tienen las dependencias del Estado por encontrar a sus familiares y al contrario cuando comienzan a exigir su derecho, comienza el hostigamiento y las amenazas.
La verdadera salida al terrible problema que lleva doce años sucediendo en todo el país tiene una verdadera salida en la desmilitarización del país, en terminar con la falsa “Guerra contra el narcotráfico”. Es necesaria la más amplia unidad de las familias de los desaparecidos cobijadas con la fuerza de los estudiantes, la juventud y las organizaciones de trabajadores que juntos luchemos por la aparición con vida de las decenas de miles de desaparecidos en el país, por encontrar justicia y castigo a los responsables de ejecutar está terrible masacre.
Andrés Manuel López Obrador, el presidente electo ya salió, a declarar que no frenará esta guerra y que mantendrá a los militares en las calles cumpliendo funciones policíacas, también ha dado la espalda a las familias de desaparecidos haciendo un llamado a perdonar a quienes se llevaron a sus familiares, incluso sin haber sido encontradas.
La perspectiva de un movimiento nacional independiente del Estado y sus instituciones, compuesta por los familiares de desaparecidos y las víctimas de esta guerra contra el pueblo, junto con la juventud, las organizaciones de derechos humanos y las organizaciones de trabajadores, que exijan el regreso de los militares a los cuarteles es la verdadera salida al grave problema que vive nuestro país. |