Este miércoles 26 de septiembre se cumplen 4 años del asesinato en Iguala de 3 estudiantes de la Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, y la desaparición forzada de otros 43 a manos de sicarios y la policía, con la complicidad del ejército. Sus madres, padres y compañeros siguen exigiendo su presentación con vida.
El sangriento sexenio del presidente Enrique Peña Nieto está por terminar sin que se sepa nada cierto sobre el paradero de los 43 normalistas. Por el contrario, el gobierno federal se aferra a la “verdad histórica”, según la cual los estudiantes fueron incinerados en un basurero de Cocula, lo que ya se demostró científicamente imposible. Muchos de los detenidos como presuntos “autores materiales” fueron brutalmente torturados para obtener sus declaraciones, lo que evidencia que se trató de un montaje de la Procuraduría General de la República (PGR) para que no se sepa la verdad y así encubrir a los responsables políticos de este crimen de Estado.
¡Ni perdón, ni olvido!
Fue tal el desorden en la forma que se llevaron adelante las investigaciones, que un Tribunal Federal ordenó la creación de una “comisión de la verdad” para reponerlas. El nuevo gobierno de López Obrador se comprometió a instalarla. Pero, al mismo tiempo, anunció que mantendrá al ejército en las calles y que no derogará la Ley de Seguridad Interior, la cual les asegura impunidad a los militares en su accionar contra los movimientos sociales y la población en general. Con su política de “reconciliación”, López Obrador tampoco se propone castigar a los verdaderos responsables de la masacre de Iguala y de la desaparición forzada de los 43.
La PGR y las demás instituciones de “procuración de justicia”, más allá de quien las encabece, ya dieron sobradas muestras de que nada bueno podemos esperar de ellas. Confiar en que el Estado “resolverá” los crímenes en los que está involucrado sólo puede llevar a nuevas frustraciones.
La Izquierda Diario habló con integrantes de la Agrupación Magisterial y Normalista Nuestra Clase sobre la investigación y señalaron la necesidad de "poner en pie una gran Coordinadora Nacional Contra la Represión y la Militarización para impulsar la movilización a lo largo y ancho del país, e imponer una comisión independiente integrada por personalidades y representantes de sindicatos, organizaciones sociales, políticas y de derechos humanos, nacionales e internacionales, con plenos poderes para llevar hasta el final todas las líneas de investigación".
Las organización llamaba a movilizarse este miércoles "junto a los estudiantes que están luchando contra la represión, contra los ataques porriles (bandas paramilitares) y por la democratización de sus escuelas, para hacer patente que no olvidamos a nuestros 43 compañeros de Ayotzinapa, que seguiremos luchando hasta encontrarlos y lograr el castigo para los responsables políticos de su desaparición forzada".
En la Ciudad de México se preparaba una marcha convocada por los padres y las madres de los 43 y la Asamblea Interuniversitaria, del Ángel de la Independencia al Zócalo a las 4 de la tarde (hora local). |