Fotografías: Matías Baglietto/Enfoque Rojo
Los mineros de Río Turbio están acampando desde el lunes frente el Congreso. Viajaron 3000 kilómetros para denunciar que el Presupuesto 2019 implica un ajuste al Yacimiento Carbonífero, poniendo el riesgo cientos de puestos de trabajo pero también la generación de energía para la región.
Este miércoles habían comenzado el día participando del abrazo al Hospital Posadas, donde rechazan los despidos y el brutal ataque a la salud pública. Las trabajadoras del hospital y los mineros ya están hermanados en la lucha, una unidad que forjaron en acciones desde principios de año.
Por la tarde tenían prevista una nueva acción: el carbonazo. Cuando cayó el sol fueron hacia el final de la Plaza, y volvieron al grito de “¡aquí están, estos son, los mineros del carbón!”. Detrás de sus banderas, sus cascos, sus linternas, venía un camión lleno de carbón que descargaron en 14 tachos frente al Congreso. ¿Por qué catorce? Porque la actividad también era un homenaje a sus 14 compañeros que murieron dentro de la mina en junio de 2004.
Fue así que a las 21 hs encendieron su reclamo frente al Congreso. Junto a las trabajadoras del Posadas, a los obreros del Astillero, a los trabajadores del Inti y la PIAP (planta de agua pesada) denunciaron el ajuste de Macri sobre los estatales pero también sobre todo el pueblo trabajador. Denunciaron que ellos y ellas son los que pueden dar energía, pueden curar, y el Presupuesto de Macri y el FMI los tiene en la mira.
Esta semana seguirán acampanado, difundiendo su conflicto y confluyendo con otros sectores que resisten. La lucha contra el Presupuesto 2019 puede convertirse en una de las grandes peleas de la clase trabajadora en las próximas semanas y los mineros dejaron clara su postura.
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