En la mañana de hoy, el Gobierno Provincial de Gutiérrez otra vez anunció con bombos y platillos la construcción de un hospital nuevo, los trabajadores de salud que todos los días sostenemos con nuestro trabajo y nuestra lucha la defensa de la salud pública, sabemos que no existen intenciones inmediatas de resolver la crisis que vive el sector en la provincia de Vaca Muerta.
Mientras el Gobierno del MPN, se muestra “dulce” por el incremento de los ingresos por regalías del petróleo en nuestra provincia, la realidad del sector salud sigue siendo crítica. El servicio de pediatría del Hospital de Centenario continúa sin pediatras, distintos sectores se ven afectados por la falta de insumos, el área de pediatría del Hospital Castro Rendón sigue con un importante déficit estructural y la bomba de cobalto para tratamientos de radioterapia fue recientemente clausurada.
El suceso más reciente ocurrido en la noche de ayer fue el desperfecto de un ascensor en el Hospital Neuquén mientras se trasladaba al quinto piso a un paciente internado al quedar atrapados dentro del mismo por más de 40 minutos. Por la falta de mantenimiento y desinversión estos hechos suelen ser habituales, poniendo en riesgo integridad de pacientes y trabajadores teniendo que maniobrar en estas condiciones.
Paradójicamente el Ministro de Salud Corradi Diez se da el lujo de anunciar públicamente que se están realizando obras en el Hospital Castro Rendón como el reemplazo de ascensores y la construcción del bunker para el futuro acelerador lineal, siendo estas inciertas. Lo real es que siguen ocurriendo episodios de riesgo y aun ninguna obra de las que se anuncian ha comenzado.
La comunidad, los trabajadores y las trabajadoras no podemos esperar los supuestos tres años para la inauguración de un nuevo hospital que resuelva la problemática que se atraviesa día a día el sistema de salud pública en lo que refiere a infraestructura, insumos, aparatologías y personal.
Aun se desconoce cuál será el monto asignado para el presupuesto de salud pública del próximo año, los trabajadores exigimos que se incremente en función de los recursos económicos que ingresan en forma extraordinariamente a nuestra provincia en concepto de regalías ante la suba del dólar, asimismo continuamos denunciando que se deje de financiar clínicas y laboratorios privados sosteniendo, con derivaciones el negocio de unos pocos empresarios, amigos del gobierno del MPN, en desmedro de la salud pública.
Por su parte los sindicatos en salud, se quedan conformes con continuar negociando la reglamentación de un convenio colectivo de trabajo que no resuelve la crisis de fondo de la salud pública. Nos dicen que esperemos al 2019 garantizándole la paz social al MPN mientras el ajuste carcome nuestras vidas y condiciones de trabajo.
Los trabajadores de los hospitales y centros de salud, estamos convencidos que la salud pública es un derecho humano fundamental y lejos de considerarla una mercancía, queremos continuar impulsando una gran campaña en defensa de este derecho fundamental para la población, que le pare la mano a los planes de Macri, el FMI y el Gobierno de Gutiérrez. |