Foto: Sara Gutiérrez / La 5ta Pata
El pasado miércoles 24, diputados dieron media sanción al Presupuesto 2019. En un escenario de rechazo popular y represión, el Macrismo junto a sus aliados del radicalismo y el peronismo votaron un brutal ajuste a Educación, Salud, Ciencia, Vivienda y Transporte.
En términos nominales el presupuesto aumentó un 30,36 %; pero si consideramos que la inflación oficial estimada para el 2019 es del 34,8 %, el presupuesto se reduce un 3,3%. Midiendo la inflación para finales de este año en 45%, los datos vertidos por el nuevo presupuesto muestran una caída real desde 2017 del 15 %.
A esto se suma que, en el mismo presupuesto, tampoco hubo aumento en las becas, lo que significa una pérdida real del 25% en el Plan Progresar. Además el recorte en los subsidios al transporte generará nuevos tarifazos que afectan a la mayoría de los estudiantes, en particular a los que vienen de otros departamentos. Este combo, en un escenario de alta inflación, impactará en el aumento de la deserción universitaria y dificultará el ingreso.
Midiendo la inflación para finales de este año en 45%, los datos vertidos por el nuevo presupuesto muestran una caída real desde 2017 del 15 %.
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Los cómplices del ajuste que se lleva adelante en la UNCuyo son la UCR-Pro y el PJ, que el pasado miércoles votaron este ajuste que generará peores condiciones en la educación pública. Desde el peronismo discursivamente se oponen al ajuste de Macri pero a la hora de votar en el congreso nacional le siguen garantizando las leyes que necesita para que la crisis la paguemos los trabajadores y la juventud.
Frente a este nuevo escenario de ajuste los estudiantes tenemos que retomar la organización y movilizaciones de miles que impulsamos este año, y organizarnos para pelear contra este presupuesto de ajuste.
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