El secretario de salud Adolfo Luis Rubinstein autorizó hoy un nuevo aumento de las prepagas, en lo que será el quinto del año. Este nuevo regalo a la medicina privada puede llevar a que las facturas tengan aumentos de hasta el 8% a partir del primero de diciembre.
Rubinstein explicó que la vía libre a los aumentos en las cuotas se dan por "fundada en variaciones de la estructura de costos y razonable cálculo actuarial de riesgo". Las subas en el sector comenzaron en febrero con un 4%, luego en junio aumentó otro 7,5% y otro 7,5% desde agosto. El último aumento fue a principios de este mes, cuando las cuotas se actualizaron con un aumento del 8%.
El sistema de prepagas cuento con 6 millones de beneficiarios, de los cuales 1,2 millones son voluntarios, pero la cantidad de usuarios viene cayendo por los aumentos y por la alta inflación y la megadevaluación que han carcomido los salarios que se proyecta tendrán una caída del 11% promedio.
Mientras el presupuesto que votó el macrismo con la ayuda del peronismo en diputados –y que se aprestan a oficializarlo con la votación en el senado- conlleva un recorte a la salud pública, que ya de por si, se cae a pedazos. Con este nuevo aumento en las prepagas, millones de trabajadores tendrán que ver cómo hacen para manejar sus gastos en salud, entre un sistema público colapsado y desfinanciado y una prepaga imposible de pagar. Mientras tanto los que siguen festejando, son los empresarios. |