La comisión de mujeres de Madygraf está demostrando en sus iniciativas que es necesario preservar la fuente de trabajo, que la expropiación debe ser efectiva y que para ello necesitan el apoyo de todas las familias obreras, como lo han demostrado ellos mismos donando cuadernos a las escuelas públicas de la zona norte.

En esta pulseada que estas grandes mujeres se plantean, queda demostrado que solo los trabajadores y trabajadoras pueden ponerle al hombro a las necesidades de la familia obrera.

Mientras muchas compañeras salen a trabajar para sostener los hogares mientras sus sus compañeros trabajan para que Madygraf siga cumpliendo con su producción, y seguir recibiendo trabajo de sus históricos clientes y demostrar que nadie mejor que ellos para manejar la producción de la gráfica, ellas pusieron en pie la juegoteca donde los hijos de los trabajadores podrán permanecer mientras sus madres y padres cumplen con sus jornadas laborales, algo indispensable en este momento, donde también levantan la voz por los derechos de las mujeres y por guarderías en todos los lugares de trabajo.
La comisión de mujeres pasó a cubrir las responsabilidades que el sindicato ha dejado de llevar a cabo abandonando a los trabajadores en esta justa lucha, como la compra de útiles para el inicio de clases a base de los aportes obtenidos de los torneos de fútbol realizados y el fondo de lucha conseguido con la solidaridad del movimiento obrero de la zona norte. Y en el camino de trazarse esos grandes objetivos fortalecen la campaña por la expropiación y estatización bajo gestión obrera.