La entidad redujo sus tasas en un punto, hasta el 14 por ciento, continuando un ciclo de alivio que comenzó en enero, cuando rebajó de forma inesperada el indicador en dos puntos.
Esta vez, la medida era esperada por la mayoría de los analistas, atendiendo a las señales de estabilización del mercado de divisas y a datos recientes que mostraron un rápido declive de la actividad económica.
El rublo se fortaleció ligeramente tras la decisión, ya que el recorte fue menor de lo esperado por algunos analistas.
El banco central dijo en un comunicado que, "al igual que antes, el balance de riesgos está posicionado hacia un significativo enfriamiento de la economía".
La rebaja de tasas ayudaría a mitigar estos riesgos sin crear amenazas de una mayor inflación, señaló.
El banco restó importancia a la inflación, de un 16,7 por ciento en la actualidad, asegurando que es producto de factores de corto plazo que concluirán a finales de 2015.
Asimismo, predijo que la inflación caerá hasta cerca del 9 por ciento en un año y que aún está en buen camino para alcanzar el objetivo del banco a medio plazo, de que se desacelere al 4 por ciento en 2017.
La entidad aseguró que la débil actividad económica ayudará a reducir la inflación. Predijo, igualmente, que el Producto Interno Bruto caerá entre un 3,5 y un 4 por ciento en 2015.
Fuente: Reuters |