Sebastián Piñera conmemoró los 70 años de la publicación de la Declaración Universal de Derechos Humanos (1948) en una actividad realizada a las afueras del palacio de La Moneda. En la instancia aseguró que se deben respetar los derechos humanos con especial énfasis en los menores, discapacitados, adultos mayores y migrantes.
Con ello, remarcó Piñera “el derecho a la vida y el derecho a la libertad. Y también no estar sometido a esclavitud y tortura, a la libertad de opinión, libertad de expresión y muchas otras libertades”.
Sin embargo, organizaciones migrantes y promigrantes han denunciado la vulneración del derecho migratorio ante la decisión del Ejecutivo de no asistir al encuentro que se realizará en Marrakech, Marruecos, para suscribir el Pacto Mundial para la Migración de la Organización de Naciones Unidas (ONU), sumándose a países como Estados Unidos e Israel quienes no apoyarán el documento que será validado por más de 180 países.
Además, se suma la crisis del gobierno en torno al respaldo institucional a la violencia policial y vulneración a los derechos humanos del pueblo mapuche, mujeres, niños y trabajadores, expresado en el repudio del asesinato del joven comunero mapuche Camilo Catrillanca, donde el gobierno ha querido restarse de las responsabilidades.
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