Hace más de 30 años que no hay huelgas docentes en el estado de California. Este lunes, después de haber sido pospuesta la semana pasada, el sindicato docente UTLA (Docentes Unidos Los Ángeles por sus siglas en inglés) llamó a una huelga pidiendo la reducción del número de alumnos por clases, que va de 40 a 60 alumnos, más personal de apoyo y aumento salarial. Más de 30.000 afiliados respondieron al llamado y marcharon por las calles de la ciudad a pesar de la persistente lluvia.
Se hace imposible no pensar en la llamada Teacher´s Spring (primavera docente) del año pasado que tuvo paros y distintas medidas de fuerza en estados como West Virginia, Kentucky, Oklahoma y Arizona, principalmente por condiciones laborales pero también por aumentos de salario, con la gran diferencia de que en este caso, es el sindicato el que se puso a la cabeza del reclamo.
“Marchamos por el futuro de la educación pública” aseguró Michael La Mont, docente de escuela primaria mientras participaba de la concentración en el centro de la ciudad. “No hacemos esto por diversión. Está lloviendo. No nos van a pagar”. La Mont expresa el sentir de miles de docentes que, tras más de 20 meses de negociación con el estado de California, decidieron dar un paso adelante en su lucha y salir a la calle. Además del tamaño de las cursadas, el reclamo incluye personal de apoyo para orientación y enfermería”. Lin Joy Hom, docente de educación física resume la situación de la siguiente manera, “no puedo decirle a mis alumnos que no se lastimen un martes, porque los martes no tenemos enfermería. Necesitamos personal estable todos los días”.
La última oferta del LAUSD (distrito escolar unificado de California por sus siglas en inglés) incluye la reducción de dos alumnos por clase, personal de biblioteca para cada colegio secundario y personal de enfermería para cada colegio primario. Hoy por hoy el distrito solo garantiza la enfermería un día por semana aunque muchos colegios usan sus fondos adicionales para pagar más días. El problema con esta propuesta es que el personal de apoyo solo será garantizado por un año, ya que el LAUSD dice que los fondos saldrán de una partida presupuestaria extraordinaria y que el año que viene ya no la tendrán.
La naturaleza transitoria de la propuesta hizo que desde el UTLA la descartaran inmediatamente, incluso antes de sentarse a negociar, y se decidieran por la vía de la huelga.
Algunos alumnos junto son sus padres decidieron apoyar a los docentes y unirse a ellos en las calles. Este hecho, junto con el recuerdo del apoyo recibido por sus pares de otros estados, hizo que muchos docentes californianos se decidieran a salir a luchar.
Julia Wallace, miembro de Left Voice y parte de la Red Internacional la Izquierda Diario, participó de la marcha en el primer día de huelga, solidarizandose con la lucha de los docentes. Allí manifestó que “los docentes principalmente están acá para pelear contra los intentos de privatización de los colegios públicos y estamos aquí solidarizandonos con ellos. Esta lucha es la de todos los trabajadores. Vamos a seguir apoyandolos”.
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