Cerca de 40 personas se reunieron en Patricio Lynch con 21 de mayo para manifestarse a favor del uso del cannabis para fines medicinales, recreativos, espirituales, etc. La convocatoria inició a las 11 de la mañana con rumbo a la Intendencia.
Desde el comienzo se pudo apreciar un gran contingente policial que les causó extrañeza a los manifestantes, debido a que era una actividad completamente pacífica y con un número pequeño de asistentes. Hubo dos incidentes, el primero fue que Carabineros pidió retirarse a un joven que había llevado una planta a la manifestación, amenazándolo con que si no se iba "meterían a todos adentro".
El segundo suceso fue que al comenzar la actividad uno de los jóvenes asistentes desplegó un mantel con dibujos alusivos a la marcha, siendo de inmediato abordado por Carabineros, los que le pidieron que guardara el mantel. A esto hay que sumarle la constante provocación policial durante el trayecto de la marcha. Para algunos, esta conducta hace énfasis a que hoy en día la marihuana es un tema tabú y siempre se estigmatiza a los consumidores.
En el transcurso de la marcha se pudo ver la gran aceptación de la ciudadanía, dando gritos de apoyo, o haciendo comentarios a favor de la legalización o despenalización. Ignacio Cortes, estudiante de trabajo social en la Universidad de Tarapacá comentó que “lo que se exige, es un cambio en la política de drogas, la marihuana puede ser fácilmente adaptable a nuestra sociedad tanto desde el punto de vista medicinal, como recreativo”.
La marcha terminó con la entrega de una carta al Intendente, y con un discurso de Eduardo Rodríguez, presidente en Arica de la Fundación Daya, quien hizo alusión a la autonomía de los consumidores, al uso medicinal del cannabis y sus beneficios, y que se baje del primer lugar a la marihuana como droga dura. | 
